En los últimos dos meses la planta de extracción de miel municipal en San Rafael procesó alrededor de 50.000 kilos.
Se trata de una herramienta que la comuna pone a disposición de apicultores del departamento, quienes llevan los panales para extraer la miel que luego tienen a disposición para comercializarla. Habitualmente la envasan en tambores de 200 litros.
“Es un espacio muy útil para nuestros productores apícolas. Actualmente estamos trabajando con tres días de producción y seis obreros fijos por turno, todo bajo estrictos protocolos sanitarios por la pandemia y con estándares provinciales y nacionales de higiene para el proceso”, expresó la responsable del lugar, Iris Castro.
El proyecto fue creado en 2005 y se sostuvo en el tiempo hasta lograr una capacidad de producción de 140 tambores diarios.
Aquellos productores apícolas que quieran dejar su materia prima en la planta municipal, pueden acercarse a Tulio Angrimán al 1.500, solicitar un turno y luego presentar la documentación allí requerida.
Las instalaciones funcionan de acuerdo a las normativas vigentes para certificar e implementar programas de “Buenas Prácticas de Manufactura”, bajo estándares que permiten exportar a los países demandantes de miel.
Cada año se atiende a más de un centenar de productores, quienes realizan la labor junto a sus familias y los empleados.
El uso de la sala de extracción comunitaria permite achicar los costos de producción y lograr mejores beneficios para los productores.