Lugareños y pobladores del interior de la provincia de San Luis reclaman porque los caminos y accesos a las localidades son imposibles de transitar debido al estado en el que están. La mayoría de los tramos son de tierra lo que produce que luego de las lluvias se llenen de barro y nadie pueda pasar por ahí.
Ante esta situación el diputado del Frente San Luis Unido, Juan Manuel Rigau envió una nota al director de Vialidad provincial, Daniel Bassi pidiendo el arreglo de 33 rutas y caminos vecinales del interior, informó El Chorrillero.
Rigau explicó que por el estado en el que están los caminos "los chicos que van la escuela, quienes deben asistir a un centro de salud o tienen que realizar un trámite en el municipio más cercano", no pueden hacerlo.
Hasta el momento han detectado doce caminos arruinados en el departamento Ayacucho, seis en el departamento Pringles, dos en los de Chacabuco y Pedernera, en San Martín y Belgrano cuatro, y uno en Dupuy.
Para el diputado Vialidad Provincial "está diezmada, prácticamente, porque pasó de ser una escuela de oficios a no tener personal para manejar las máquinas".
Sostuvo que el organismo dependiente del Gobierno de San Luis "está más atento al arreglo de autódromos que a caminos o rutas vecinales" y criticó el levantamiento de gran parte de los campamentos que la entidad había emplazado en las localidades del interior.
Los caminos deteriorados en el departamento Pringles afectan a los vecinos y niños que deben asistir a las escuelas "Granadero Tomas Cuello", de Paso del Rey; "Historiador Urbano J. Núñez", de Fraga y "Balde de la Isla".
Cabe recordar que en esas zonas no existe el transporte público, por lo que es aún mas dificil de acceder y terminan transitando con sus propios vehículos por los caminos dañados. Rigau indicó que ante la falta de "recursos y comodidades" muchos pobladores optan por abandonar la zona rural.
"Estamos pidiendo al Gobernador que haya prioridad (…) que realmente el interior sea visto de otra manera. El olvido que hay es cada vez más grande", concluyó.