Para este fin de semana largo, San Luis ofrece múltiples alternativas para pasear y hacer actividades al aire libre, a lo ancho y a lo largo de toda la provincia, con amigos o en familia. Te mostramos, a continuación, 4 senderos imperdibles al pie de las sierras.
Los cuatro senderos para disfrutar de San Luis
- Cerro Valle de Piedra – Potrero de los Funes
Este es uno de los cerros más altos de Potrero de los Funes, tiene 1.953 metros sobre el nivel del mar (msnm). Está situado al oeste de Cerro Quijadas y al norte del Valle de la Paz.
Está cubierto por una tupida vegetación de molles, talas, y espinillos. Camino a su cumbre, uno se encuentra con el arroyo Los Molles, con su agua cristalina que recorre las sierras formando diversos piletones naturales.
Para llegar a la cima, se deben atravesar diversas quebradas que maravillan los ojos.
- El Trekking hacia el Valle de Piedra
Para llegar a este cerro, se puede subir en auto por el camino detrás de la iglesia hasta la 3° curva. Desde ahí se accede al sendero principal tras una caminata de unas 9 horas, bordeando el arroyo Los Molles.
Se continúa por el sendero con varias curvas, ya a 1.300 msnm aproximadamente. La vegetación se va disipando y empiezan a aparecer los peñascos rocosos acompañados con un estrato herbáceo, de allí el nombre del cerro.
El camino se vuelve cada vez más empinado y, hacia la izquierda, se observa un arroyo. A la derecha, algunas cascadas del río Los Molles se pueden visualizar.
Así se llega al cauce de un arroyo, lugar ideal para un descanso y admirar la quebrada rocosa. A partir de ahí la subida se hace más empinada y ya se tiene una vista de todo el valle y la ciudad Capital.
Por último, se llega así a la planicie con miles de rocas por todos lados, con hermosas vistas. Se camina unos 200 metros hasta la base donde sobresale la punta rocosa del cerro, y se asciende unos 70 metros finales para llegar a la cima.
- Recomendaciones para la caminata al Cerro del Valle de Piedra
Este es un trekking de dificultad moderada, si bien está bastante marcado el sendero, el recorrido para llegar a la cima es largo, casi 7 km, con un desnivel de 900 metros. Hasta la cima son 5 horas en forma tranquila y 4 horas el descenso.
- Datos Útiles/Recomendaciones:
Tiempo aproximado 9 horas, por lo que se tiene que salir temprano.
No está permitido hacer fuego, llevar 1 litro de agua o más, dependiendo de las temperaturas.
Ir acompañado con guía habilitado se puede consultar por uno en la oficina de turismo de Potrero de Los Funes.
- Cerro de la Cruz – Juana Koslay
Ubicado entre la localidad de Juana Koslay y la ciudad de San Luis, es uno de los cerros más visitados por las y los puntanos debido a su cercanía y fácil acceso desde la capital.
El Cerro de la Cruz posee una altura de 1.215 msnm. La caminata es de 6,5 km, de dificultad media, por su gran pendiente y por presentarse un poco deteriorado el suelo por el paso de cientos de personas todos los días.
El sendero está marcado en toda la longitud del camino. Sin embargo, suelen haber decenas de ramificaciones que pueden llevar a las personas a extraviarse. Por ello se recomienda ir con un guía o alguien que conozca el camino.
Al estar tan cerca de una zona muy urbanizada muchos se aventuran sin tener en cuenta aspectos básicos de una caminata. Pero, como toda actividad al aire libre, requiere de ciertos cuidados básicos: agua, calzado adecuado, gorra (no hay sombra en el camino).
Durante la caminata, tal vez la/el visitante sea acompañado por algunas cabras que pastan en la zona.
Los visitantes que dan sus primeros pasos en el trekking lo ven como una experiencia de superación personal que dejan plasmada en la típica foto con la cruz del cerro. Subir de noche y ver la panorámica de las luces de San Luis es otra postal increíble que no se puede perder.
Duración de la caminata: entre 2 y 3 horas, aproximadamente.
- Cerro El Morro – Valle del Conlara
El cerro se encuentra al sur del Valle del Conlara, al norte de San Luis, separado de otros cordones serranos. La serranía del Morro la componen el propio cerro El Morro, El Yulto, El Tala y Varela. Su altitud en el punto máximo es de 1.727 msnm.
Cabe mencionar que es posible divisarlo desde diversos puntos de la provincia al estar solitario, rodeado de una inmensa planicie.
No es un volcán como suele considerarse y en su centro se halla una “olla”, una depresión geológica de unos 4 kilómetros de diámetro que encierra otros conos volcánicos conocidos como “mogotes”.
Los distintos escenarios que ostenta el cerro posibilita la práctica de variadas actividades al aire libre: trekkings o safaris fotográficos que invitan a descubrir maravillosas postales.
- Senderismo por el Cerro del Morro
Se lo puede recorrer a caballo, a pie o por caminos para vehículos 4x4. Cabe aclarar que la subida en vehículo no es sencilla, especialmente si toca tiempo lluvioso.
Una manera de subirlo es bordear el cerro hacia el Sur, poco antes de llegar a la localidad de San José del Morro. Allí está la estancia La Morena: esta es la puerta de acceso.
Desde allí, cabe la posibilidad de subir el “volcán” (con 700 m de desnivel) haciendo trekking o en una 4x4 por la huella que nos lleva hasta el cráter.
Ideal para iniciar en el mundo del senderismo, clubes de montañismo lo eligen para principiantes por la baja dificultad de sus senderos. Sin embargo, en este cerro hay la neblina suele ser frecuente durante el año, algunas de ellas reducen la visión tanto para conductores de vehículos como algún caminante desprevenido en el cerro.
Hay agencias de viajes en San Luis que hacen excursiones al cerro y caminatas organizadas por clubes de montañismo.
- Salto de la Negra Libre – El Trapiche
Está escondido en el Valle de Pancanta a 20 kilómetros de El Trapiche, precipitándose de una altura de más de 60 metros y conformando un enorme piletón natural de 25 metros de diámetro.
La leyenda dice que su nombre se debe al recuerdo de una esclava a quien llamaban “La Negra”, quien en busca de su libertad se lanzó al río en este lugar para nunca más ser encontrada. Los lugareños dicen que esta cascada simboliza su libertad.
Es más, este lugar se caracterizó tiempo atrás por ser uno de los sitios preferidos por las antiguas comunidades huarpes y comechingones que habitaron la región.
- Caminata hacia el Salto de la Negra Libre
La duración de la caminata es de unas 8 horas. No hay grandes desniveles y el grado de dificultad es intermedio.
En la zona no existe ningún lugar para adquirir nada, por lo que es fundamental ir preparados: protector solar, gorra, ropa cómoda y deportiva y 2 litros de agua por persona (luego se puede recargar en los arroyos y vertientes).
Si bien lo ideal es ir lo más liviano posible, una cámara de fotos se vuelve también imprescindible.
Es necesario comenzar bien temprano y tener en cuenta que son 16 kilómetros en total, entre la ida y la vuelta, sumados a la placentera necesidad de refrescarse y nadar en el río y en la olla del mismo salto.
El camino comienza con un primer tramo tranquilo, entre pastizales llanos con paredes de pircas que atraviesan el campo y dividen los terrenos. Los afluentes que se encuentran son el río Grande y el río Pancanta, así como también el arroyo Piedras Blancas.
El paisaje es impactante a cada paso y, luego, cada parte del recorrido va presentando sus encantos y desafíos: saltar las piedras, escalar murallones naturales, pasar por el agua o recorrer las innumerables subidas y bajadas.
El salto es realmente imponente: una cascada de unos 65 metros de altura en el paisaje, más una pileta natural de unos 25 metros de ancho y 18 metros de largo.