Luego de presentar su renuncia a la dirección del Hospital Marcial Quiroga, la doctora Inés Garcés rompió el silencio y habló con radio AM 1020 sobre el tema. En ese diálogo radial, afirmó que su decisión tenía que ver solo con que su juramento hipocrático la hace no coincidir con la implementación de la ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE).
“Nunca podría garantizar matar a alguien porque realmente mi juramento hipocrático dice que jamás tengo que hacer daño y luchar por la salud de la gente”, sostuvo en la entrevista radial. Además, expresó que el Código Civil y Comercial indica que se es persona desde el momento de la concepción y que la “ciencia no cambió”.
“El cargo lo venía ejerciendo como se me solicitó y estoy agradecida por ese reconocimiento para seguir otro mandato, pero realmente hay una convicción personal: no coincido con esta ley”, agregó. Garcés había indicado su postura en 2018, cuando comenzó a debatirse el proyecto del aborto en el Congreso de la Nación: “No podía esconder una convicción tan fuerte”.
Además, agregó: “Yo tengo la oportunidad de dar un paso al costado porque no soy ginecóloga. No puedo seguir en el cargo porque la ley no prevé la objeción de conciencia institucional”. En ese sentido, argumentó que desde 2018 todos los ginecólogos del Hospital Marcial Quiroga le manifestaron, tanto de manera verbal como por escrito que eran todos objetores de conciencia y que no iban a cumplir con la ley. Además, reconoció que el 1 de diciembre pasado sucedió algo parecido ya que el jefe del servicio le aseguró que todos los ginecólogos del nosocomio eran objetores.
Por otro lado, recordó la manifestación que se hizo en la puerta del hospital: “No recibí ninguna amenaza, salvo una persona de apellido Garrido que se manifestó en la puerta del hospital, pero no lo tomé como una amenaza, sino como una manifestación de la otra parte”.
Por último, Garcés admitió que el sábado por la mañana habló con la ministra de Salud de San Juan, Alejandra Venerando, y que le presentó la renuncia, la cual fue aceptada. “A las 00 horas del domingo, cuando cobraba vigencia la ley, avisé de mi decisión y la ministra me dijo que la renuncia estaba aceptada”, concluyó.