La última semana de marzo en San Juan se vivió de forma trágica y en cuestión de días tres hombres aparecieron asesinados en su casa. Golpizas brutales y puñaladas fueron las formas en que murieron las tres víctimas de una semana para el olvido en la provincia. Así lo publicó el diario Tiempo de San Juan que hizo un relevamiento con los tres casos que conmocionaron en los últimos días y que preocupan a las autoridades policiales. Se trata de Silvio Carpio de 47 años, Jesse Jay Cieslicki, de 37 años y el último macabro hallazgo que ocurrió el domingo electoral, con la muerte de Aldo Agustín Perez, de 67 años.
Los tres homicidios tienen en común que ocurrieron en las viviendas donde vivían las víctimas que fueron halladas por familiares, por algún amigo o inclusive por vecinos. Los tres fueron golpeados brutalmente, a exepción de Silvio Carpio que, además de la golpiza, recibió varias puñaladas en todo su cuerpo.
Silvio Carpio fue el primero en aparecer muerto en su vivienda de la Villa San Damián, en Rawson, al Sur de la provincia, el 23 de marzo. Fue un sobrino suyo que lo fue a visitar quien lo encontró tirado en medio de un charco de sangre. A Carpio lo mataron a golpes y también le dieron varias puñaldas. De su casa faltaban una hormigonera, un DVD y dos garrafas. Esto fue fundamental para detener a tres amigos de la víctima que tenían en su casa las pertenencias robadas y algunas prendas con sangre.
Jesse Jay Cieslicki apareció muerto el 26 de marzo, en una vivienda de Sarmiento, una localidad rural de la provincia. Cieslicki había estado la noche anterior con dos amigos, el "Tucumano" Nievas y la novia de éste, Brisa Balmaceda. Ambos fueron detenidos horas más tarde porque la Policía los encontró escondidos en una plantación de melones. También eran amigos de la víctima y lo mataron con la pata de una mesa, se cree que para robarle.
El tercer y último crimen para cerrar con una semana trágica en San Juan fue el de Aldo Agustín "Chato" Pérez, un hombre de 67 años que fue asesinado durante el domingo electoral del 31 de marzo. La víctima vivía en el Barrio Hualilán, al Sur de la provincia. También fue asesinado a golpes y un amigo de él apodado como el "Piolín" quedó detenido. La principal hipótesis es que a Pérez lo mataron por una vieja bronca.