Horas difíciles corren por estos días para Fernando Páez Asis, un sanjuanino que desde hace cinco años y ocho meses vive en Catamarca y que por un conflicto con la hija de su ex pareja, ya fallecida, está a punto de quedarse en la calle. Según contó Fernando a Diario La Provincia, estuvo en pareja con Viviana Mabel Rubio, con quien convivió todos estos años, y llevó adelante la administración del parador N° 4, "Collana Mayo". Desde el pasado 13 de julio el hombre vive un verdadero infierno. Es que ese día murió su mujer tras luchar contra el cáncer y él tiene que afrontar ahora un intento de desalojo y varias denuncias mediáticas de la hija de ella.
"Todo esto es muy duro. A mí me quieren echar de mi hogar. Todo esto es muy difícil para mí y me duele aún más que se levante la voz de esta chica que es mentirosa que lo único que hizo es generar problemas hacia a mí y a mi familia. Hace un mes que falleció mi señora y que pase esto me duele mucho. Ni siquiera he podido ir a despedirme, ni siquiera he podido ir al cementerio a llevarle unas flores", relató Fernando.
El joven contó que la hija de su mujer usó las redes sociales para difamarlo e incluso una vez lo encaró en el centro con un celular en la mano y lo filmó mientras lo agredía verbalmente al grito de asesino. "Si hubiera tenido una denuncia por violencia de género saldría, no tengo nada de eso. Soy una persona de bien", agregó llorando por la angustia que le genera toda esta situación.
"Estoy desbordado de emociones. Vivo momentos muy difíciles en Catamarca, vivo solo en medio del campo y no tengo señal, estoy aislado, estoy a media hora de la ciudad en auto. Vivo arriba y ahora me están entregando una orden de restricción y le estoy por poner un bozal legal a la mujer. Es muy difícil. Esta chica me abordó filmándome con el teléfono y me trató de asesino. Ya tengo una denuncia penal contra ella", agregó el joven subrayando que tiene varias denuncias por calumnias e injurias porque "ella no tiene cómo comprobar nada de lo que está diciendo".
El parador con el que trabaja es uno de los más conocidos en la zona. Éste está abierto todo el año y ofrece servicios de cabalgatas, meriendas, comidas. La mujer tenía contrato hasta el 2021, pero al fallecer, Turismo de Catamarca se amparó en un punto del contrato asegurando que quedaba sin efecto y por eso pidieron el desalojo del lugar.
