El paro nacional de la Confederación General del Trabajo, en rechazo a la política económica del Gobierno de Mauricio Macri, tuvo un fuerte impacto en la provincia de San Juan. Desde muy temprano el movimiento fue mínimo, sobre todo, por la falta de transporte público. Y si bien la mayoría de los comercios de Capital y departamentos aledaños están abiertos, hay pocos compradores en los locales.
La convocatoria de la cúpula de la CGT a la medida de fuerza para ese miércoles 29 de mayo fue acatada por la mayoría de los gremios sanjuaninos. Casi todos los servicios están suprimidos o reducidos en su funcionamiento habitual por 24 horas, a excepción del ECO y el servicio de limpieza que funcionan con normalidad.
Los principales afectados fueron los alumnos de todos los niveles, tanto de la educación pública como privada. Los gremios Unión Docentes Argentinos (UDA), Unión Docentes Agremiados Provinciales (UDAP) y Asociación del Magisterio de Enseñanza Técnica (AMET), que nuclean a los docentes de primaria y secundaria, se sumaron a la medida de fuerza.
Lo mismo ocurrió con la Unión de Tranviarios Automotor (UTA), por lo que no hay colectivos en corta, media y larga distancia en San Juan. En cuanto a los vuelos, Aerolíneas Argentinas reprogramó 300 vuelos y hubo más de 37 mil pasajeros perjudicados. Tampoco hay bancos pero sí se pueden realizar operaciones en los cajeros automáticos.
Los edificios públicos, como el Centro Cívico, abrieron sus puertas pero con personal reducido. Según publicó Diario de Cuyo, los estatales que vive a más de 6 kilómetros están autorizados a no asistir a su trabajo.