Un grupo de emprendedores de la ciudad, diseñó y fabricó una cabina de desinfección que se comenzará pronto a comercializar. La primera será donada al Hospital de San Francisco.
Se trata de una estructura de 2 metros de alto y 1 de ancho y profundidad y posee un sensor que detecta cuando una persona ingresa en la cabina y activa una neblina accionada por un nebulizador automático que contiene agentes desinfectantes.
Esta neblina va a sanitizar a las personas íntegramente ya que el coronavirus puede estar adherido a la superficie de la ropa o el calzado. Aseguran que la misma es eficaz en un 99% para neutralizar bacterias, virus, hongos y esporas.