La desaparición de Franco Cuéllar, un joven estudiante oriundo de Tartagal que se encontraba estudiando en la facultad de ingeniería de la UNSa, causó un gran revuelo en Salta, especialmente por la campaña que la familia de Franco desplegó en redes sociales solicitando la colaboración de la sociedad para dar con su paradero.
Finalmente, y tras varios días de búsqueda, el cuerpo del joven fue hallado en la zona sudeste de la ciudad, cerca del río Arenales. Tras el hallazgo, el fiscal adelantó que el joven había muerto por ahorcamiento.
Ahora el informe preliminar de autopsia, arrojó que el joven no presentaba signos externos de violencia que puedan hacer presumir que fue víctima de la comisión de algún delito y que la causa de muerte sería asfixia mecánica por ahorcamiento, por lo que se presume que el joven Franco se quitó la vida.
Entre las pertenencias del joven que se encontraron en la escena, está su teléfono celular. Para conocer otros detalles, solicitaron estudios complementarios como anatomopatológicos, toxicológicos y entomológicos, que permitirán precisar en forma certera la data del fallecimiento.