En paralelo con un acampe para pedir seguridad en Rosario, este lunes a la tarde asesinaron a balazos a dos mujeres en la zona sur. Al día siguiente, la Justicia provincial confirmó que una de ellas era Marta Susana Bustamante. Antes del crimen, la “Chana” fue denunciada por narcotráfico y hace dos años y medio habían intando matarla.
La víctima de 50 años supo estar bajo prisión domiciliaria en barrio Tablada como parte de las causas en las que fue imputada. Después del fin de semana, dos delincuentes en auto fueron a buscarla hasta su casa en pasaje Guerrico al 3700, cerca del cruce con 24 de Septiembre.
Bustamante cayó herida alrededor de las 18.30 en la puerta del domicilio que también tenía un almacén. Desde allí la llevaron hasta el Hospital Provincial y finalmente se confirmó su muerte por las lesiones que sufrió.
Durante el operativo posterior a la denuncia en la zona sur rosarina, la Agencia de Investigación Criminal (AIC) recogió al menos cuatro vainas servidas como rastro del homicidio. Los primeros testigos entrevistados en barrio Tablada apuntaron que los asesinos viajaban en un Volkswagen Gol gris.
El Ministerio Público de la Acusación (MPA) detalló que la “Chana” recibió un balazo fatal en la cabeza. El fiscal Alejandro Ferlazzo trabaja sobre la hipótesis de que le dispararon desde el vehículo en el que iban los agresores.
¿Quién era la “Chana” Bustamante?
Antes del asesinato registrado este lunes, Marta Bustamante fue el blanco de otro ataque a balazos en barrio Tablada. La noche del martes 10 de diciembre de 2019, dos personas en moto abrieron fuego contra la esquina de Guerrico y 24 de Septiembre.
Los investigadores creen que los agresores pretendían intimidar a la familia de la “Chana” a partir de un conflicto con su yerno, pero mataron por error a un vecino. Luego de los disparos, Felipe Schneider (65) fue internado en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca).
El jubilado recibió un balazo en el ojo izquierdo cuando estaba cerca de la ventana de su casa. Dos días más tarde, murió por la lesión. En mayo de 2022, Lucas “Berraco” Espinoza fue condenado a 20 años de prisión como autor de homicidio agravado por el uso de arma fuego y la portación ilegítima de la misma.
