En los últimos cinco años, Santa Fe se ubicó como la segunda provincia con más femicidios. La mayoría de los casos se concentran en Rosario y las autoridades advirtieron este miércoles un nuevo aspecto de la problemática en cuanto al aumento de asesinatos en contextos de narcocriminalidad.
Desde la Secretaría de Estado de Igualdad y Género advierten que la situación en la ciudad no sólo se caracteriza por la “masividad”, sino también por episodios en los que las mujeres son víctimas de violencia vinculada a las disputas por el negocio de las drogas ilegales.
En cuanto a las estadísticas sobre el escenario actual en medio de la pandemia, la subsecretaria María Florencia Marinaro destacó también que están en alerta por los femicidios en pequeñas localidades santafesinas. Así recordó como ejemplos recientes los crímenes de Julieta Delpino en Berabevú y María Florencia Gómez Pouillastrou en San Jorge.
“Apenas asumimos hicimos un protocolo de actuación. Al otro día del caso, un equipo visita el lugar. No hacemos prensa, no lo damos a conocer, es un trabajo interno nuestro y nuestra obligación para ver qué falló, si hubo acompañamientos previos”, explicó la funcionaria a cargo del área de Mujeres, Géneros y Diversidad.
En diálogo con LT8, Marinaro consideró que “las violencias son estructurales” y “el Estado también tiene que responder de esa forma”. Sobre esta cuestión, adelantó que están trabajando con el Ministerio Público de la Acusación (MPA) para crear un “observatorio único a nivel provincial que registre todas las situaciones de crímenes por razones de género”.