El casildense muerto en una endoscopía había superado una operación a corazón abierto

Pedro Cipoletti tenía 65 años y falleció en circunstancias similares a las de la periodista Débora Pérez Volpin.

El padre de Gabriel ingresó este lunes a la tarde al centro de salud. (Diego Lon)
El padre de Gabriel ingresó este lunes a la tarde al centro de salud. (Diego Lon)

Mientras la Justicia espera los resultados de la autopsia para dilucidar lo que parece un caso compatible con el de Débora Pérez Volpin, el hijo del casildense que murió tras una endoscopía reveló que los médicos consiguieron reanimarlo durante "dos minutos" antes de su deceso.

"Para mí no lo monitorearon. Terminó de hacerse el estudio, le empezaron a pegar en la cara y no respondía", contó Gabriel Cipoletti sobre lo ocurrido el lunes pasado en el Sanatorio Primordial.

En un reportaje con Radio 2, el muchacho recordó que ese día estaba en la sala de espera junto a su madre y su hermano cuando recibieron la noticia tan trágica como inesperada. Sobre el hecho, comentó: "Estuvo 15 minutos y en ese interín nos dijeron que había fallecido".

De acuerdo al relato recogido por la familia, los médicos llamaron a una cardióloga cuando advirtieron que el paciente no se despertaba después del estudio con video por vía baja. El día después de los allanamientos ordenados por el fiscal Juan Pablo Baños, el centro de salud descartó responsabilidad penal en el episodio y defendió la labor de los profesionales involucrados.

El hijo de Pedro Cipoletti contó que su papá tenía antecedentes y "le dieron medicamentos" para tomar antes de la endoscopía. "Hace cuatro años tuvo una operación de corazón abierto de siete horas y se la bancó como los mejores", apuntó. Luego del secuestro de la historia clínica y demás documentación, la Justicia espera poder realizar la autopsia en Rosario en el transcurso de la semana que viene.