Después de varias semanas de demora, se publicó la resolución por la cual Nación enviará $6.500 millones en subsidios para el transporte urbano e interurbano del interior del país. Sin embargo todavía restan algunos pasos burocráticos, y hasta tanto los choferes rosarinos no cobren lo adeudado, mantendrán el paro.
La última medida de fuerza ya lleva 12 días ante la falta de pago de la mitad del salario de julio, el 50% del primer aguinaldo, segunda cuota de un bono y la totalidad del sueldo de agosto. Al descongelarse los fondos nacionales, se espera que este dinero sea transferido a las provincias, encargadas de derivarlo a los municipios, luego a las empresas y de ahí a los trabajadores. Una vez que la plata aparezca en las cuentas de los choferes, se levantará la medida de fuerza.
Las partidas nacionales comprometen a las jurisdicciones a mantener el actual esquema tarifario, que en Rosario es de $32,50 pese a que el último estudio de costos arrojó que el boleto debería estar $73,81, y avanzar en la adhesión e implementación de la Tarjeta Sube. Este último ítem hace años que viene siendo exigido por las distintas administraciones nacionales pero nunca se puso en marcha.
De acá a fin de año restarán otros $4.000 millones que Nación deberá enviar al interior para cumplir el convenio acordado a mediados de junio con las provincias.