La policía de Villa Gobernador Gálvez confirmó que un joven fue baleado luego de forcejear con un suboficial cuando fue a buscar a su hermano a la comisaría. El episodio se registró días después de que la conducción de la fuerza habilitara el uso de cartucho en recámara, una medida que generó críticas incluso dentro del propio Gobierno provincial.
La denuncia sobre lo ocurrido el último viernes en la seccional 29 refiere que el uniformado disparó por accidente cuando trataron de quitarle su arma reglamentaria. La víctima sufrió una herida en su pie izquierdo, por lo que se abrió una investigación sobre el hecho en paralelo con otra causa por resistencia a la autoridad.
Según el parte oficial al que accedió Rosario 3, el efectivo involucrado tenía cargada su pistola Bersa Thunder tal como establece la normativa que firmó la semana pasada el director general de la policía santafesina, Víctor Sarnaglia. La primera versión sobre la secuencia indica que el suboficial tenía el arma en la cintura y se la llevó al pecho para evitar que se la arrebataran.
El relato oficial plantea que el balazo fue accidental y se vincula directamente al intento de agresión por parte de un joven de 19 años que había ido con su madre a la Comisaría 29° a pedir que liberaran a su hermano, demorado en las dependencias. Las autoridades a cargo del registro alegaron que "en todo momento" el uniformado tenía "el cañón apuntado hacia abajo".
