Luego de las lluvias registradas a principios y a final de la semana, las fuerzas de seguridad y el personal del Gobierno de Santa Fe seguían trabajando junto a los vecinos de Melincué para reforzar las defensas ante el descenso en el nivel del agua dentro del casco urbano.
Las tareas se complicaron este sábado debido al derrumbe de los terraplenes sobre la Ruta Provincial 90 a la altura del hotel Ruca Malen. Sin embargo, la bajante en el canal San Urbano hacía pensar que para el domingo sería posible poner en marcha las bombas de desagüe.
Según informó la emisora La Nueve de Venado Tuerto, alrededor de 40 soldados del Ejército Argentino estuvieron reforzando el muro de contención que separa la laguna de la ruta, donde la cota del espejo de agua supera en altura la traza.