A más de una semana de que saliera a la luz la aberrante historia de una mujer que pasó décadas cautiva en la casa de su pareja en barrio Cura, la Justicia provincial ordenó este lunes mantener bajo prisión domiciliaria al padre del acusado. El hombre de 85 años está bajo sospecha como partícipe necesario de los delitos denunciados el último 8 de mayo.
Luego de la audiencia que se llevó a cabo por la mañana, el Ministerio Público de la Acusación (MPA) confirmó que Rafael Racco fue imputado por privación ilegítima de la libertad agravada en concurso ideal con reducción a la servidumbre. En el caso de su hijo Oscar, el juez Juan Andrés Donnola aceptó un pedido para investigarlo bajo esta última calificación legal y considerarlo como probable autor del delito en grado consumado.
La fiscal Luciana Vallarella sostuvo ante el magistrado que el anciano prestó colaboración para que la víctima de 43 años continuara retenida contra su voluntad en la vivienda de Santiago al 3500 hasta que ella pudo escapar aprovechando un descuido. Puntualmente la funcionaria afirmó que el dueño del inmueble se "benefició" con su sometimiento y "presenció situaciones de violencia".
El principal imputado en el caso tiene 57 años y quedó bajo prisión preventiva por 60 días el 29 de mayo. Su pareja tenía el pelo rapado y usaba ropa masculina cuando le permitían salir a la calle acompañada. Además de los golpes y agresiones físicas, el MPA busca corroborar si Racco también ejerció violencia psicólogica sobre ella mediante amenazas.