La Justicia rosarina confirmó este miércoles el traspaso formal de la investigación sobre la muerte de un bebé cuyo cuerpo fue hallado en un basural de la zona sudoeste. La decisión se tomó luego de constatar que se trataba de un recién nacido vivo, por lo que el caso pasó a manos de la unidad de Homicidios Dolosos.
La pesquisa que comenzó el martes a las 14 había corrido por cuenta de la fiscal Mariana Prunotto, quien pertenece al área de Homicidios Culposos. La funcionaria había solicitado la autopsia del cuerpo en ese momento y finalmente el Instituto Médico Legal (IML) corroboró por esa vía que el pequeño había llegado a respirar, por lo que se trataba de un parto a término.
De acuerdo al preinforme recibido por el Ministerio Público de la Acusación (MPA), el niño tenía 37 semanas de gestación. De todos modos, voceros del organismo aclararon que el primer examen forense no permitió corroborar la causa del deceso y se esperaban nuevos reportes médicos.
Ya con el fiscal Luis Schiappa Pietra a cargo de la pesquisa, las autoridades seguían abocadas a entrevistar a los vecinos de Avellaneda y Battle y Ordóñez para esclarecer el hecho. Entre otros elementos de interés para la causa tambien estaba pendiente el relevamiento de cámaras de seguridad en el sector donde descartaron el cadáver.