La bajante histórica de los ríos que afecta a gran parte de la región se mantiene y no se prevén mejoras en el corto plazo que cambien el caudal de donde el Estado chaqueño se provee de agua cruda para potabilizarla.
La situación aporta más drama aún a los flagelos del coronavirus y el dengue en nuestra provincia, que de esta manera afronta un nuevo frente que no puede pasarse a segundo plano. La empresa estatal del servicio de agua reconoció que hay un 25 por ciento menos de producción por la pérdida de los rendimientos de las bombas de las tomas.
La gran causa es el fenómeno del río Paraná que exhibe registros que rondan apenas el metro de altura en Barranqueras, en un hecho histórico que no registra antecedentes hace más de 50 años. Días atrás el Servicio de Agua y Mantenimiento Empresa del Estado Provincial (Sameep) informó sobre los trabajos realizados en la toma de agua en el río Paraná prolongando la succión para poder conseguir el líquido vital para su proceso.