Con la entrega de las últimas tarjetas alimentarias, Chaco logró ser la primera provincia del país en distribuir los plásticos en todo su territorio. La política beneficia de manera directa con 328 millones de pesos mensuales a 66.499 chaqueñas y chaqueños y a 2200 comercios adheridos a la red de proveedores locales.
El gobernador Jorge Capitanich y la vicegobernadora Analía Rach Quiroga supervisaron la entrega de tarjetas Alimentar en General Pinedo, Corzuela, Las Breñas y Charata en una jornada que incluyó operativos en 11 localidades. De esta manera concluyó la entrega de las 66.499 tarjetas previstas para la etapa inicial del programa nacional Argentina contra el Hambre en Chaco, primera provincia en implementarlo en todo su territorio.
“Estamos volcando 328 millones de pesos mensuales, unos cuatro mil millones de pesos al año a la comercialización de alimentos, es una herramienta extraordinaria para la recuperación de la economía local que potencia el consumo y el comercio”, resaltó el gobernador durante la recorrida por los operativos de la que también participó la ministra de Desarrollo Social María Pia Chiacchio Cavana. La jornada incluyó también la entrega de las tarjetas a beneficiarios y beneficiarias de Gancedo, General Capdevila, Campo Largo, Hermoso Campo, La Clotilde, La Tigra y San Bernardo.
Así, más de 66 mil chaqueñas y chaqueños ya cuentan con sus tarjetas que les garantiza el acceso a una alimentación saludable en más de 2.200 comercios adheridos en toda la provincia. “Las tarjetas son una herramienta clave para impulsar una política social, inclusiva y sustentable contra el hambre, a través del desarrollo productivo, la generación de empleo, y la reactivación de las economías locales” expresó el mandatario, quien en los últimos 13 días recorrió, junto a la vicegobernadora más de 50 localidades para supervisar y garantizar la efectividad de los operativos.
De aquí en más, el Gobierno trabaja en los acuerdos con comerciantes y productores para fijar un precio de referencia que les garantice rentabilidad sin perjudicar el poder adquisitivo de los beneficiarios. Los comercios interesados deben inscribirse a través del Banco del Chaco y contar con la terminal eléctrica de lectora de tarjetas. También se realizarán ferias francas todos los terceros viernes de cada mes, para brindarles un espacio de comercialización de su producción a pequeños productores y trabajadores de la economía popular y la agricultura familiar.