La Suprema Corte revisó la sentencia contra Andrés Di Césare, quien había sido condenado a 18 años por el crimen de Julieta González, y le dio perpetua por considerar que fue un femicidio.
El crimen ocurrió en 2016, cuando la joven desapareció en Maipu y su cadáver se halló en Luján de Cuyo. Tres años más tarde, el Tribunal Penal Colegiado Nº 2 dictó sentencia contra Di Césare por homicidio simple, descartando el femicidio y la prisión perpetua que habían solicitado la fiscalía y la querella.
La justificación fue que los magistrados sostuvieron que la víctima y el condenado estaban de novios con otras personas y destacaron que González “tenía demasiada independencia personal e íntima”, que se veía con otros dos hombres y estaba “acostumbrada a relacionarse fácilmente”.
Ahora, el máximo tribunal consideró que se trató de un femicidio, por lo que dio lugar al recurso para que se condene a Di Césare a prisión perpetua.
La nueva condena pudo darse gracias a que la Suprema Corte esta misma semana falló por 7 a 0 a favor de la constitucionalidad de la prisión perpetua.