En este verano muy particular, afectado por la pandemia, Mendoza ha sido una de las provincias más elegidas por los turistas. El turismo interno y la apertura de la provincia para recibir la visita de pasajeros de todo el país desde fines de noviembre hizo crecer las esperanzas del sector que viene muy golpeado. Lo que se conoce como el “turismo de naturaleza” se llevó todo el protagonismo y así, zonas como Alta Montaña y el Sur provincial han sido y siguen siendo los lugares más buscados por turistas locales y visitantes.
Pese a estos problemas el sector apunta a seguir reponiéndose luego de un año en completa parálisis. Esto hizo que desde el Gobierno provincial se anunciara el programa “Sale Finde”, que propone a los mendocinos/as la posibilidad de acceder a un paquete turístico exclusivo al 50% de la tarifa regular.
La iniciativa no sólo incrementó la expectativa de los residentes de Mendoza sino también la del sector hotelero y gastronómico que confía en que desde el 1 de febrero- fecha en la que entra en vigencia la campaña- la situación mejorará un poco más.
Fernando Barbera, presidente de la Asociación Empresaria, Hotelero, Gastronómica y Afines de Mendoza (AEHGA), explicó a Sitio Andino que “Los mendocinos y mendocinas son los que más se han movido por la provincia. Quizás se pueda pensar que es una obviedad pero lo cierto es que aún con la oferta nacional, han elegido pasear por la provincia y visitar lugares en los que nunca estuvieron o en los que no habían pasado noches. Creo que muchos/as han aprendido a ver realmente su provincia, conocerla y apreciar sus atractivos”.
“Febrero es otro mes en el que seguiremos sin turismo internacional y no sabemos cuánto habrá de nacional. De ahí, la idea de esta campaña que apunta principalmente a mendocinos/as y, lógicamente, esperamos que luego se pueda extender a otras provincias. No obstante, la expectativa que tenemos es que haya muchas reservas porque los precios son realmente muy buenos, son bajos, sólo nos sirven para cubrir costos pero genera movimiento”, sumó.
Al realizar un balance sobre el trabajo del sector durante diciembre y enero y con el turismo interno y nacional ya en funcionamiento, Barbera señaló que en “la zona de Ciudad y en algunos puntos de Gran Mendoza, la hotelería ha tenido y tiene un nivel de ocupación muy bajo. Durante diciembre estuvo en un 12%, mientras que en la primera quincena de enero subió poco: apenas rozó el 20% y en la segunda ha mejorado, alcanzando casi al 30%. Esto provocó que actualmente aún haya muchos hoteles de 3, 4 y 5 estrellas que tras sacar cuentas decidan no abrir sus puertas porque no les conviene con esa baja demanda”.
El empersario hotelero destacó que “Ahora bien, lo que es el turismo de naturaleza está trabajando muy bien. Desde lo que es Alta Montaña como Potrerillos, Uspallata y hasta Valle de Uco, Cañón del Atuel, Malargüe, son algunos puntos que no tienen relación con las urbes y, en consecuencia, los que mayor cantidad de visitantes reciben, alcanzando el 70% de ocupación, es decir, que están trabajando al máximo dentro de la capacidad que está permitida por los protocolos sanitarios vigentes”.
Respecto de los protocolos Barbera aclaró que seguirán trabajando con los que rigen desde que se habilitó el turismo interno, a mediados del 2020, “porque están muy aceitados y se cumple con todo sin ningún tipo de inconveniente, no creemos que se modifiquen en el resto de la temporada aunque por supuesto eso dependerá de la situación epidemiológica y las decisiones que tomen las autoridades al respecto”, concluyó. Fuente Sitio Andino