El Tribunal Oral Federal Nº2 condenó este lunes a dos choferes peruanos a la pena de diez años de cárcel por el mayor caso de narcotráfico registrado en Mendoza: transportaban 221 kilos de cocaína.
La mercadería que viajaba oculta en cargas con doble fondo en un ómnibus de la empresa Ormeño, proveniente de Perú, tenía como destino final Buenos Aires.
Los 200 panes rectangulares envueltos en bolsas de nylon fueron ocultos entre el tranque de residuos del sanitario y el compartimento de la rueda de auxilio, debajo de una chapa sujeta con dos tornillos, con sus bordes recubiertos con espuma de poliuretano.
Por este hecho, los choferes peruanos Luis Antonio Collahua (53) y Geremías Lisario López Garay (55) fueran condenados a diez años de cárcel por el delito de ocultar o disimular mercadería que debería someterse a control, y el agravante cuando se trata de estupefacientes elaborados o semielaborados.