"El Código de Faltas de Cornejo viene a cercenar ciertos derechos; uno, por ejemplo, puede decir lo que se le ocurra a cualquier persona, pero no al gobernador, ni al vicegobernador, ni a los legisladores. Crea una especie de fuero de nobleza, que en realidad nos preocupa. Hace diferencias entre pobres y ricos, el que tiene plata paga la multa y el pobre, va a la cárcel", remarcó el senador Marcelo Romano, del Partido Intransigente.
Marcelo Romano, de esta forma, fue uno de los que más ofuscados se vio con la aprobación en el Senado del nuevo Código de Faltas de Mendoza.
En cuanto al FIT, Lautaro Jiménez opinó en consonancia con sus pares.
"Un código punitivo, que es una especie de Código Penal y no contravencional, provincial. Se imponen multas y días de arresto para quienes marchan y se movilizan en pos de protestar por sus derechos. El afán de este código es recaudador y punitivo", destacó el legislador.
