Las supuestas faltas de control al ingreso de los vinos importados motivó la reacción del Instituto Nacional de Vitivinicultura, que salió a aclarar los equívocos o dudas que se generaron y que tuvieron eco en algunos medios de comunicación.
El comunicado emitido por el ente precisa que "la República Argentina suscribió junto con Australia, Georgia, Canadá, Chile, Estados Unidos de América, Nueva Zelanda y Sudáfrica un Acuerdo de Aceptación Mutua de Prácticas Enológicas, aprobado e incorporado a nuestra legislación por Ley N°25.960 de fecha 3 de diciembre de 2004".
El Instituto Nacional de Vitivinicultura exige para la circulación de vinos importados en territorio Nacional, el estricto cumplimiento de lo establecido por el art. 22 de la Ley N° 14.878; esto es, la presentación de certificado de genuinidad y aptitud para el consumo expedido por las oficinas autorizadas del país de origen, sin que estos productos puedan ser mezclados con otros productos importados y/o con vinos nacionales.