Este es un Viernes Santo diferente en el Calvario de Mendoza, porque la pandemia de coronavirus impidió que miles de fieles se acercaran hasta el lugar como ocurre todos los años para Semana Santa.
Sin embargo, un mendocino decidió violar la cuarentena obligatoria que rige en todo el país para prevenir la propagación de la enfermedad, y se fue a rezar al pie de la cruz. A pesar de la prohibición, y de que no hubo Vía Crucis guiado, para este hombre fue más importante su fe.
Según destacó diario El Sol, en horas de la mañana no hubo controles en ese sector de Carrodilla, en el momento en el que el sujeto se encontraba rezando.
Son millones de cristianos en todo el mundo quienes este viernes conmemoran la crucifixión de Jesús sin las emotivas procesiones y aislados por el Covid-19.