En el Hospital Lagomaggiore de Mendoza comienzan a extraer sangre de cordón umbilical, que se almacena para ser utilizada para trasplante de médula ósea o leucemias. De esta forma, la provincia se suma a otras regiones del país que ya recolectan en efectores estatales para enviar al Banco Público de Sangre de Cordón Umbilical que funciona en el Hospital Garrahan de Buenos Aires.
Se trata de una actitud altruista vinculada al compromiso social. Se identifica como donación de cordón umbilical no relacionado, ya que va destinado a cualquiera que lo necesite, no necesariamente a un familiar.
Se trata de células progenitoras hematopoyéticas (CPH), conocidas comúnmente como células madre, las que se encuentran en mayor concentración en el cordón umbilical y tienen la capacidad de renovar las células sanguíneas. Su principal característica es que son células inmaduras que pueden dividirse y diferenciarse para dar origen a todos los tipos celulares maduros de la sangre: glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas.
El cordón, que luego del nacimiento suele desecharse, puede aprovecharse para esta donación voluntaria que puede salvar vidas.
El director del Lagomaggiore, Mario Bustos Guillén, explicó: "Una vez que nace el bebé se le corta el cordón, se lo plantea, se ubica la vena umbilical y partir de ahí se hace la extracción. Se recolecta la sangre bajo condiciones estériles y con personal entrenado como si fuera una donación de sangre tradicional. Se la congela y por medio del Incucai esa donación termina en un banco público".
Además, indicó que la madre tiene que cumplir ciertos requisitos específicos: “La mamá tiene que ser como mínimo mayor de 18 años, no haber tenido enfermedades venéreas, no haber tenido enfermedades oncológicas y se debe realizar como mínimo en la semana 34 de gestación”.