En la tarde del jueves, se dio a conocer que Eduardo Lorenzo renunció en las últimas horas como capellán del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB) luego de que se publicara que el cura había sido denunciado por abuso sexual de adolescentes de un grupo parroquial de Gonnet.
Lorenzo fue confesor del fundador de Felices los Niños, padre Julio César Grassi, condenado por corrupción de menores.
Según informó TN, al momento de presentar su renuncia, el cura apeló a la estrategia común de ponerse en el lugar de víctima de una campaña mediática de la que no explicó su origen: "El motivo de mi decisión se fundamenta en la campaña mediática, calumniosa e injuriosa, que se ha desatado contra mí persona. A fin que esto no afecte el buen nombre del servicio penitenciario y de la capellanía que con la ayuda de mis hermanos sacerdotes y las religiosas hemos construido".
Por su parte, los padrinos de la víctima que denunció al cura, aseguraron que el accionar del hombre se "lo tomamos con bastante sorpresa y consternación: primero lo relevaron como capellán de los boy scouts y ahora del servicio penitenciario. Es una modalidad parecida al retiro voluntario mansamente sin nada que lo provoque".
A su vez, agregaron: "Nos hubiera gustado que estas medidas se hubieran analizado hace más de una década cuando realizamos las denuncias con todos los elementos. La opinión pública, sensibilizada por el periodismo, fue determinante para poner en superficie esta situación de abuso y encubrimiento que excede el caso Lorenzo", avisaron la familia adoptiva de la víctima.