Preocupación en el barrio platense de Altos de San Lorenzo. Un jubilado analfabeto firmó una orden de desalojo y ahora podría quedar en la calle sin nada. Los vecinos se movilizan para ayudarlo.
Se trata de Manuel Humberto Rodríguez, pero en el barrio lo conocen más como el "Cordobés" y desde el 15 de mayo de 1981 vive en una casa en 76 entre 20 y 21, según detalla El Día. La propietaria, una mujer de 72 años, busca recuperar el lote.
"Es muy querido y respetado. Evitó usurpaciones en la zona y que venga gente de mal vivir. Como no sabe leer ni escribir, fue engañado en una empresa de recolección de residuos en la que trabajó durante décadas. Es casero, nunca le pagaron por eso y ahora lo quieren echar", dijo Cristian Mazzeo, uno de sus vecinos.
El abogado de la dueña del lugar, Laura Torres, señaló que "se sabe desde septiembre de 2017 que Rodríguez tiene que dejar la propiedad. Hubo tiempo para buscar una salida. Torres no tiene otra propiedad y quiere recuperar lo que le corresponde".
Al mismo tiempo Ezequiel Grasso informó que "la causa tiene sentencia desde hace 18 meses" y aseguró: "Aún más, buscamos una alternativa para que vaya a un hogar municipal, pero tampoco quiso. Viene pidiendo tiempo y ya no se puede aguardar más".
Ante esta situación, los vecinos del hombre de 76 años se muestran preocupados. Rodrígues es muy querido, tanto que algunos le cocinan, otros lo ayudan a comprarse los remedios o hacer los trámites que necesite.
Desde que se enteraron que el hombre analfabeto firmó la orden de judicial montan guardias frente a la vivienda y, Mazzeo aclara: "No es para rechazar la decisión judicial, simplemente pedimos un poco más de tiempo para construir una casilla en otro lugar del barrio y evitar que el Cordobés se quede en la calle. No se lo merece, y está enfermo con Epoc".
Hoy en día el jubilado está con reposo como consecuencia de esta enfermedad. "Hizo changas hasta que pudo, hasta que le dio el cuerpo", detallan los vecinos y agregan que no tiene los servicios básicos y solo cuenta con la jubilación mínima sumado a la cobertura del Pami.
Pero el abogado de Torres sostiene que esta versión sobre la vida del hombre que recorría el país con un circo y en los 80' se quedó en la capital bonaerense, no son ciertas. "El hombre nunca fue casero del lugar. Pidió permiso para dejar unas herramientas, lo dejaron y se quedó en el lugar", señaló.
"Nunca hubo amenazas. Se le pidió que se vaya para que se cumpla una decisión judicial. Nos parece bien que haya vecinos que quieran ayudarlos, pero Torres necesita recuperar su única propiedad. Simplemente eso", concluyó el letrado.