A tres años de la desaparición de Johana Ramallo en La Plata - en un contexto de trata de personas - su madre, Marta Ramallo, denunció que el caso sigue impune, por lo cual siente que "la siguen rematando".
Johana tenía 23 años cuando desapareció, el 26 de julio de 2017. Salió a las 17 de la casa de su madre, donde vivía junto a su hija Mailén (hoy de 9 años), en la periferia de La Plata. Avisó que volvería "entre las 20.30 y las 21", pero nunca regresó. En abril de 2019, le informaron a Marta que restos humanos hallados en Berisso pertenecían a su hija.
"Mi vida se paralizó ese 26 de julio, cuando no dejaron que mi hija regrese a casa", dijo Marta a Télam. "Hace 3 años reclamaba por la aparición con vida de una Johana soñadora y luchadora; y me devolvieron un certificado de compatibilidad de restos y parte del cuerpo de mi hija".
Marta sostiene que a Johana "le faltaron el respeto" la policía, la fiscalía penal y la actual justicia federal a cargo de la causa."La vida de Johana fue muy cuestionada por la justicia", asegura.
Cuando fue a denunciar la desaparición de su hija a la comisaría de Villa Ponzatti, los policías le dijeron: "¿Con 23 años la vas a seguir buscando?". Por su parte, la fiscalía penal investigó una simple "averiguación de paradero", aun cuando Marta aseguraba que su hija no se habría ido voluntariamente dejando a su pequeña de seis años.
"Los jueces y fiscales se tienen que hacer cargo de que ellos también son parte del femicidio de Johana porque no supieron ni quisieron escuchar los pedidos de aparición con vida, no se tomaron el tiempo para encontrarla con vida", insistió. "A tres años la siguen desapareciendo y rematando mil veces más, al no darnos una respuesta firme y verdadera".
La causa, que al principio se tramitó en la justicia ordinaria, pasó hace dos años al juzgado federal 1 de La Plata, donde se tramita con la carátula de "trata de personas".
Fuente: Télam
