En horas de la tarde vecinos del lugar dieron aviso al 911 de la usurpación de los lotes que había comenzado en horas de la mañana.
La policía se hizo presente en el lugar con un operativo en el que hubo tiros, corridas y pedradas.
El desalojo se produjo mediante una orden judicial debido a la negativa de los ocupantes por dialogar.
Según vecinos del lugar, eran casi 70 personas las que comenzaron a levantar improvisadas casas en los lotes.
Una propietaria, que no se dio a conocer por temor a represalias, en diálogo con el diario El Día, dijo: "los dueños somos 250 familias que compramos lotes. En mi caso, como una inversión hace cuatro años".
Por otro lado, agregó: "el predio está situado en una zona catalogada en el municipio como rural intensiva, por lo que se han estado realizando gestiones para rezonificar. Por lo mismo, se iniciaron requerimientos ante Edelap para que se extienda el tendido eléctrico".