Con la presentación de más pruebas testimoniales, cerró la primera semana del juicio por el asesinato de Norma Carleti, ocurrido en marzo de 2018.
Sonia Lambas, nuera de la víctima, fue la primera en declarar ya que contaba una relación muy cercana con la víctima. Así comenzó la segunda jornada en la que los ciudadanos y ciudadanas que conforman el jurado escuchan la palabra de los familiares de Carleti; en la jornada del jueves ya lo habían hecho dos de sus hijos y una hermana.
El juicio se desarrolla en el Auditorio Municipal Jorge Raúl Silvano, en Tunuyán; y tiene como imputados a Leonardo Hisa (ex esposo de Carleti); los hermanos Kevin y Alexis Guerrero y el padre de ambos, Juan Carlos Guerrero, quien tenía un vínculo laboral con el matrimonio.
Todos arriesgan la pena máxima en términos penales, encuadrados bajo la figura de homicidio calificado por el vínculo y homicidio calificado por ser cometido por precio o promesa remuneratoria; Hisa en calidad de instigador, Juan Carlos Guerrero como partícipe primario y Kevin y Alexis Guerrero, como coautores.
//Mirá también: Caso Carleti: todos los testimonios apuntan a Leonardo Hisa
Poco más de 2 horas fue lo que duró la declaración de Sonia Lambas, nuera de Norma Carleti, quien accedió a las preguntas de la fiscalía, las querellas y las defensas. Su testimonio se destacó por los detalles que pudo dar en torno a la escena de los hechos, ya que fue la primera en ingresar a la casa de la víctima.
“Tras el llamado de una vecina que me alertó sobre los gritos y ruidos en la casa de mi suegra, salí con el control del garaje. Ingresé a la cocina y comencé a gritar el nombre de Norma. La vi tirada en el suelo y pensé que estaba desmayada o inconsciente. Supongo que no quería ver lo que en realidad había pasado porque intenté incorporarla y buscaba que reaccionara. Tenía golpes en la cara y había sangre en su boca. Cuando me sacaron y vi que en el living había sangre y muebles rotos, comencé a caer en la cuenta de lo que estaba pasando. Avisé a dos de los hijos de Norma que habían entrado a robar”, comenzó relatando.
Al igual que ocurrió con los familiares de Norma Carleti que declararon en la jornada anterior, otro punto de interés fue el viaje a Buenos Aires realizado la semana anterior al crimen.
“Yo la convencí de hacer ese viaje y compré los pasajes. No creo que Leonardo Hisa estuviese al tanto del viaje. Norma me contó que él le había pedido una reunión y ella le dijo que no podría porque viajaba a Buenos Aires y que eso le había llamado la atención a Hisa”, señaló la testigo ante el jurado.
Por el tipo de relación que dijo mantener con quien era su suegra, esta testigo fue consultada sobre el estado de ánimo de Norma Carleti en el último tiempo.
“Estaba triste y enojada, como con una angustia permanente. Había encontrado la forma de salir de eso a través del divorcio que estaba decidida a iniciar, pero esto para ella también era un fracaso, porque se trataba de su segundo divorcio. Se sentía traicionada por Leonardo Hisa y no pasaba un día sin llorar”, detalló.
Las partes también estuvieron interesadas en el aporte que Sonia Lambas pudiera aportar sobre la composición accionaria y societaria de la firma Las Lomas, que era compartida por el matrimonio Hisa-Carleti.
Lo que la testigo pudo decir estuvo referido a la división de bienes que incluía la sociedad. “La existencia de las dos fincas que eran parte de la firma Las Lomas fue el obstáculo para no llegar a un acuerdo en la separación. Norma proponía dividir todo en 50% de división y Leonardo quería el 100%. De hecho, sobre las fincas, mi suegra me contó que Leonardo una vez le dijo: “de las fincas salimos con los pies para adelante yo, o con los pies para adelante vos”, detalló.
En cuanto a la presentación del divorcio, declaró en el mismo sentido que los hijos y una hermana de Carleti. “El mismo domingo en que luego murió hablé con ella y me dijo que al otro día iba a ir con sus abogados a formalizar una presentación”, dijo Lambas.
Abogado de Norma Carleti: “Había decidido encarar el divorcio”
También fue convocado a declarar bajo juramento un abogado penalista que fue consultado por el estudio que asesoraba a Norma Carleti en el proceso de divorcio.
Este testigo aclaró que no conoció personalmente a la víctima, sino que el vínculo se realizó mediante sus asesores letrados.
“Habían decidido encarar el divorcio y la separación de los bienes y mi función era ver si cabía iniciar una demanda penal. Pensaban en una suerte de vaciamiento de la sociedad anónima Las Lomas, porque entendían que Hisa o terceros hacían operaciones para vaciar la firma y ya se habían agotado todas las posibilidades de negociación. Íbamos a tener una reunión con la señora el lunes 5 de marzo, cuando me levanto ese día, me enteré de lo que había sucedido”, inició su relato.
//Mirá también: Se entregó la abogada acusada de varias estafas en San Martín
Más datos sobre el Fiat 600 blanco
Este viernes también declaró una allegada a la familia de Juan Carlos Guerrero y vecina de este imputado. Y su declaración estuvo relacionada con las circunstancias que rodean al auto que habría sido utilizado para ir a la casa de la víctima y luego escapar; coche que al otro día aparecería incendiado.
“Ese día escuché un vehículo en el fondo de mi casa, entre las 11 y la 1 de la mañana. Había voces femeninas y masculinas y no sabía que habían comprado un vehículo. Pasaban una situación económica que no era buena, como compartíamos lote, tenía que esperar a que ellos juntaran la plata para pagar la luz. No sé de dónde sacaron para comprar el auto. Era un FIAT 600 blanco”, dijo la mujer. Luego relató que posterior al crimen, observó una camioneta 4x4 de color claro estacionada en la puerta de la casa de los Guerrero.
La mujer también dijo conocer que Juan Carlos Guerrero trabajaba para Leonardo Hisa y afirmó que a veces llevaba a su hijo Alexis con él.
Reconocimiento de los cuchillos
La declaración de la empleada doméstica de Norma Carleti estuvo marcada por el reconocimiento de los cuchillos que fueron utilizados para ultimar a la víctima.
La testigo vio las imágenes de tres cuchillos y los reconoció como parte de los elementos de cocina de Norma Carleti. Pudo reconocerlos porque según dijo, “a veces hacía trabajos de cocina también”.
El testimonio de esta mujer de confianza de Carleti también versó sobre los movimientos que había en la casa. “Había una oficina en la que trabajaba una secretaria que cobraba alquileres, llevaba papeles y pagaba impuestos. A veces venían personas a pagar a la casa”, contó.
Al igual que los testigos anteriores del círculo familiar de la empresaria, contó que ésta tenía miedo y que en último tiempo discutía mucho con Leonardo Hisa.
“A veces las discusiones subían de tono y yo me retiraba todo lo posible para no escuchar. Ella había cambiado las cerraduras y me contó que no podía cambiar el control remoto del garaje. A veces se daba cuenta de que le faltaban cosas y eso la hacía enojar mucho. Una vez faltaba un elemento para limpiar la pileta y ella creía que había sido Leonardo que había entrado a la casa”, detalló.
Un testigo y dos videos
La última de las declaraciones fue un custodio penitenciario que presenció varias audiencias en las que le tocó prestar servicio a cargo de la guarda de los detenidos en esta causa.
A este efectivo se le mostraron dos videos de diferentes audiencias que presenció. En uno de ellos se lo ve a Juan Carlos Guerrero levantarse y decir señalando a Hisa “el señor de allá mandó a matar a la señora. Tengo pruebas y las voy a presentar”.
El otro material audiovisual que le fue mostrado y en el que confirmó haber estado presente, mostraba a Juan Carlos Guerrero decirle a uno de los hijos de Norma Carleti en la audiencia: “Quiero que el señor Gómez Carleti me compruebe que soy un asesino. La querella tiene gente paga”.
Curato intermedio hasta el lunes a 9 de la mañana
El Juez Técnico David Mangiafico dispuso un cuarto intermedio hasta el lunes a las 9, cuando el jurado popular vuelva a presenciar una jornada de presentación de pruebas y testigos en el Auditorio Municipal de Tunuyán.
Para entonces se espera que declaren dos internos penitenciarios que compartieron tiempo en prisión con Kevin Guerrero y habrían tenido acceso a una confesión de los hechos.