La rutina del comienzo de semana en la capital jujeña y otras zonas del este de la provincia se vio sacudida -literalmente hablando- este mediodía cuando a las 12:48 un temblor se hizo sentir moviendo de sus asientos a quienes estaban trabajando y haciendo pendular lámparas y objetos colgantes de los techos, dinámica que fue aún más evidente en edificios de altura.
De acuerdo a un reporte emitido por el Instituto Nacional de Prevención Sísmica (INPRES), el temblor tuvo una magnitud de 4,8 grados, el epicentro de este movimiento fue a 48 km al este de Ledesma, y a una profundidad de 29 km.
No se ha reportado daños materiales como tampoco víctimas.
La semana pasada también el departamento Ledesma, y en particular la ciudad de Libertador General San Martín, fue noticia en materia de eventos meteorológicos cuando una fuerte tempestad de lluvia y vientos azotó por menos de media hora pero con ráfagas de gran velocidad que arrancaron techos de chapa, carteles publicitarios y marquesinas, como también derribaron árboles y postes de cables de servicios públicos.
La consecuencia fue el corte de suministro eléctrico por varias horas, la escasez de agua potable en la red pública y la suspensión del dictado de clases en las escuelas y colegios de la ciudad, dado los daños provocados por el fenómeno.
Los antecedentes de temblores más recientes en Jujuy fueron dos movimientos registrados por el INPRES el domingo último, uno de ellos de 3,1 de magnitud producido a las dos de la madrugada a 44 km al noroeste de Susques y a 232 km de profundidad, y el restante de 2,9 a las 20:33 a una profundidad de 235 km, a 26 km de Susques.