Impactante revelación: médicos advierten que las alergias aumentan año tras año

En víspera del Día Mundial de la Alergia, la doctora Valeria El Haj dijo que un 20% de la población adulta de la Argentina sufre esa patología.

Impactante revelación: médicos advierten que las alergias aumentan año tras año
El polen de las plantas, los ácaros del polvo, ciertos alimentos y hasta medicamentos pueden producir alergias. Este 8 de julio es el Día Mundial de la Alergia.

Establecida por la Organización Mundial de la Alergia, cada 8 de julio es la fecha en que se recuerda el Día Mundial de la Alergia, una reacción anómala del sistema inmunológico frente a sustancias externas conocidas como alérgenos, tales como el polen, los ácaros del polvo, ciertos alimentos, medicamentos o animales.

En la Argentina, un 20% de la población adulta sufre de alergias, que lejos de ser una condición menor, van en aumento año tras año: la Asociación Argentina de Alergia (AAAeIC) estima que más de ocho millones de personas viven con algún tipo de alergia, y según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), más del 30% de la población mundial podría presentar alguna manifestación alérgica.

Entre las causas que podrían explicar este crecimiento se encuentran la predisposición genética, el cambio climático y la contaminación ambiental.

¿QUÉ COSAS PROVOCAN ALERGIA EN LA ARGENTINA?

La doctora Valeria El Haj, directora médica nacional de OSPEDYC, la obra social con origen en UTEDYC- Unión Trabajadores de Entidades Deportivas y Civiles-, explicó desde Buenos Aires que “en la Argentina, los pólenes que generan con mayor frecuencia síntomas alérgicos son los de las gramíneas, el olivo, el árbol del plátano y las cupresáceas”, estas últimas una familia de coníferas.

Dra. Valeria El Haj, directora médica nacional de OSPEDYC.
Dra. Valeria El Haj, directora médica nacional de OSPEDYC.

“En cuanto a los alimentos -siguió diciendo-, los más asociados a reacciones alérgicas en la infancia son la leche y el huevo, mientras que en adultos predominan los frutos secos, los mariscos y ciertos alimentos de origen vegetal”.

“También existen reacciones a medicamentos, especialmente a los antiinflamatorios no esteroideos y a los antibióticos del grupo de los beta-lactámicos, como la penicilina”, especificó.

¿CUÁLES SON LOS SÍNTOMAS DE UNA ALERGIA?

Los síntomas pueden ser muy variados y afectar distintas partes del cuerpo: en la nariz se manifiestan con goteo, congestión, estornudos y picazón; en los ojos con enrojecimiento, lagrimeo y sensación de arenilla; en la piel con erupciones, urticaria, ampollas o inflamación de labios y párpados.

También puede haber síntomas respiratorios como tos, sibilancias o dificultad para respirar; síntomas gastrointestinales como dolor abdominal, vómitos o diarrea; molestias musculares o debilidad generalizada; picazón en la garganta e irritación en los oídos.

“En casos más graves, la reacción alérgica puede derivar en una crisis severa o shock anafiláctico, caracterizado por inflamación generalizada, dificultad respiratoria, caída de la presión arterial, pérdida de conciencia y, en ausencia de atención inmediata, riesgo de muerte”, describió la entrevistada.

Un cuadro alérgico puede manifestarse con goteo en la nariz, congestión, estornudos y picazón; enrojecimiento y lagrimeo en los ojos; erupciones y urticaria en la piel; inflamación de labios y párpados; entre otros síntomas.
Un cuadro alérgico puede manifestarse con goteo en la nariz, congestión, estornudos y picazón; enrojecimiento y lagrimeo en los ojos; erupciones y urticaria en la piel; inflamación de labios y párpados; entre otros síntomas.

¿CÓMO SE DETECTA LA ALERGIA?

La detección temprana es fundamental para poder tratar y controlar esta condición. Para ello, el alergista puede indicar pruebas cutáneas como el “prick test”, en las que se aplica una pequeña cantidad del alérgeno sobre la piel del antebrazo para observar la reacción.

También se puede realizar análisis de sangre que miden los niveles de anticuerpos IgE (inmunoglobulina E) específicos. Los anticuerpos IgE son proteínas que produce el sistema inmunológico en respuesta a sustancias que reconoce como una amenaza, como ciertos alérgenos.

Estos estudios permiten confirmar el diagnóstico y orientar el tratamiento más adecuado para cada paciente.

Al respecto la doctora El Haj explicó que “el abordaje terapéutico dependerá del tipo y la severidad de la alergia. Puede incluir el uso de antihistamínicos, colirios, sprays nasales, corticoides tópicos, inhaladores o inmunoterapia específica. Esta última, es el único tratamiento que puede modificar el curso de la enfermedad y debe ser indicado y supervisado por profesionales especializados”.

Señaló asimismo que “en los últimos años, se ha desarrollado tratamientos más avanzados como la desensibilización a medicamentos o alimentos, una estrategia útil para personas con alergias graves que deben ser cuidadosamente tratadas en centros especializados”.

¿QUÉ PUEDE HACER UNA PERSONA CON ALERGIA?

Si bien no todas las alergias son prevenibles, es posible reducir la exposición a los alérgenos y minimizar los síntomas.

Ante la aparición de síntomas, la consulta con un profesional médico permitirá la detección temprana de la patología y con ello, administrar de manera adecuada la medicación para mitigar los efectos de una alergia.
Ante la aparición de síntomas, la consulta con un profesional médico permitirá la detección temprana de la patología y con ello, administrar de manera adecuada la medicación para mitigar los efectos de una alergia.

Algunas medidas incluyen evitar actividades al aire libre los días con alta concentración de polen, usar gafas de sol y mascarilla, cambiarse de ropa y ducharse al regresar a casa, mantener los ambientes limpios y ventilados, utilizar aspiradoras con filtros especiales, evitar tener mascotas o plantas en los dormitorios y portar una identificación médica en caso de tener alergias alimentarias o medicamentosas.

“En todos los casos, ante la sospecha de una reacción alérgica, es fundamental consultar a un médico especialista que pueda realizar una evaluación clínica, indicar los estudios necesarios e iniciar un tratamiento personalizado. Vivir con alergia es posible, siempre y cuando se cuente con el diagnóstico correcto, el seguimiento profesional y los cuidados necesarios para prevenir complicaciones”, concluyó la doctora El Haj.