Michael Schumacher dejó de ser quien era el trágico 29 de diciembre de 2013, cuando sufrió un inesperado accidente esquiando en los Alpes. La vida del extraordinario automovilista, que había logrado convertirse en leyenda haciéndole frente al peligro por años, cambiaría para siempre.

Pasaron 12 años de aquel momento, desde cuando la familia decidió manejarse con un extremo hermetismo. Poco y nada se sabe del automovilista: solo trascendidos y pequeños datos que la prensa consigue en medio de acuerdos confidenciales que, a diferencia de otros casos, apenas se abren.
Lo que sí es conocido tiene que ver con su estado de daño irreversible y con los costosos cuidados que recibe de manera anual en su casa, que se convirtió en una especie de clínica privada con la mejor atención y vanguardia médica.

En medio del dolor que esa realidad constituye, la familia guarda siempre respeto y gratitud por los fans del 7 veces campeón del mundo. Así las cosas, la cuenta de fans autorizada por la familia Schumacher compartió un sentido mensaje de Corinna, la esposa del corredor.
“Extraño a Michael todos los días. Pero no soy solo yo quien lo extraña: son los niños, la familia, su padre, todos los que lo rodean. Todos extrañan a Michael, pero Michael está aquí; diferente, pero aquí. Sigue demostrándome lo fuerte que es cada día. Corinna", fue el mensaje difundido por la mujer.
El último gesto alentador de Michael Schumacher
En octubre pasado, el periodista francés Stéfan L’Hermitt, del diario L’Équipe, dio detalles sobre el estado de Schumacher. En el podcast Le Grand Récit, el periodista sorprendió al contar que, durante el último año, el expiloto mostró “avances importantes”. “Diría que no está bien, pero podría estar mejorando”, expresó.

De acuerdo con lo que trascendió sobre su presunto progreso, el corredor habría logrado firmar un casco para un evento benéfico, un gesto que fue interpretado como un avance inédito en su recuperación, según reportó el portal Sport.
“Seguimos tratando con alguien que aún respira y que podría tener algunas pequeñas interacciones con su familia, pero no podemos decir con certeza si se encuentra bien”, agregó L’Hermitt, reflejando la gran reserva que siempre rodeó al entorno del expiloto alemán.






























