Una historia de terror con un final judicializado. Un hombre azotaba a su hijastro con una manguera cada vez que el niño de 9 años regresaba a la casa con poca recaudación de la venta de churros.
El chico padecía esos castigos casi diariamente y sus hermanos también eran obligados a trabajar, por ende, todos habían abandonado el colegio.
El calvario de los pequeños, sobre todo del menor de 9 años terminó. El hombre deberá cumplir la condena en la Unidad Penal N°1 (Corrientes Capital) y someterse a tratamiento psiquiátricos por sus comportamientos violentos.
Deambulando por la calle
La causa se inició a finales de 2019 cuando una madrugada dos remiseros vieron deambular por la calle a un niño, quien además caminaba con dificultad. Los choferes lo subieron y lo llevaron hasta una radio de la ciudad porque pensaron que estaba perdido, pero una vez en la emisora, el pequeño contó lo que padecía.
Como el caso se hizo público intervino la Justicia provincial y emitió una orden de captura para el acusado, quien se aprontaba a abandonar la ciudad. Fue detenido y así inició la causa.
Por ese entonces -2019- el fiscal subrogante Patricio Palisa, se ocupó de oficio ante la mediatización del hecho. Luego lo hizo el Juzgado de Menores, acompañado donde se realizaron las actuaciones correspondientes, tras tomar contacto con la víctima.