"De los árbitros no voy a hablar, porque el árbitraje argentino pasa por un momento delicado. Pero esto se va a terminar cuando haya público de los dos. Acá, 50 mil personas piden penal y se lo dan. Te vacunan y listo, a otro partido".
La amarga reflexión de Pablo Lavallén, en referencia a las polémicas que dejó la derrota con San Lorenzo. Sobre todo en el primer tiempo, cuando Nicolás Lamolina cobró una mano de Erik Godoy para el primer gol del Cuervo, e ignoró uno muy parecido en el área del dueño de casa.
"El penal fue un golpe a la mandíbula. Belgrano fue protagonista y generamos varias situaciones claras, pero en el fútbol no hay merecimientos y el que hizo los dos goles fue San Lorenzo", asumió el DT Celeste.