Aunque la investigación no había avanzado en su momento, el policía Lucas Gómez será llevado a jucio por el presunto encubrimiento a un violador serial, en 2016, mientras se lo sigue investigando por el asesinato a sangre fría de Blas Correas.
Junto con otros agentes de la Policía de Córdoba, Gómez estuvo imputado en la causa que en 2018 condenó a Leando Castañares, quien violó a seis mujeres en La Calera y en Córdoba, recordaron fuentes judiciales.
En aquella ocasión pudo esquivar el juicio y la Policía le devolvió su puesto en la fuerza, en una decisión no exenta de polémica: "no conozco las razones por las que siguió en actividad", dijo el fiscal Marcelo Hidalgo a Cadena 3.
En el juicio a Castañares, el fiscal notó elementos para acusar a los policías de encubrimiento: "nos sorprendió escuchar los relatos de las víctimas al momento de plantear que no eran asistidas por la Policía. Entendían que había habido maniobras del personal que las instaba a desistir de las denuncias", consideró.
Gómez está detenido bajo la confirmación de que la bala que mató al adolescente Blas partió desde su arma reglamentaria, en un nuevo caso de gatillo fácil y violencia institucional registrado en la Provincia de Córdoba durante la pandemia.