Sigue el paro de choferes urbanos de Córdoba y las protestas se dividen al calor de la interna que sacude a la delegación local de UTA, donde los ánimos están caldeados.
Con dos focos diferenciados, los trabajadores del volante dividen reclamos a empresarios y reproches a sus dirigentes, con manifestaciones en avenida de Circunvalación y otras en inmediaciones de la sede gremial en avenida Vélez Sársfield, donde la Policía custodia el edificio.
En Circunvalación y San Antonio, el cuerpo de delegados de UTA realizó un piquete con quema de gomas incluidas mientras que en Nueva Córdoba se nuclearon activistas de Ersa y Aucor, que tienen críticas para la secretaria General Carla Esteban.
El paro que comenzó la semana pasada está originado en el pago incompleto de los salarios, asunto que el Municipio trata de resolver, para restituir el servicio a los maltratados vecinos cordobeses que necesitan transportarse.
En tal dirección, el subsecretario de Transporte, Gonzalo Guevara, anticipa que este miércoles hará una reunión con dirigentes de UTA para acercar una propuesta para comenzar a pagar a los choferes.
"Es una cuestión económica, no tenemos recaudación. El corte de boleto no cubre siquiera el gasoil que se necesita para mantener circulando la flota. Sólo para eso se necesitan 150 millones y estamos recaudando entre 40 y 45 millones de pesos", justificó Guevara en declaraciones a La Voz.
