La violencia no se detiene en las calles de Córdoba y este domingo fue particularmente cruento, con la muerte de un joven a manos de la Policía y el posterior ataque que sus amigos hicieron a una comisaría.
El inicio de todo fue a las 14.30, cuando unos policías acudieron a una fábrica de barrio San Lorenzo, donde se cruzaron con unos jóvenes que habrían estado robando unas chapas.
Producto de este hecho fue la muerte de Franco Sosa, de 23 años, quien cayó herido por una bala policial, que según la versión de Policía fue disparada por un agente que vio que la víctima lo habría apuntado con un arma.
Estas circunstancias todavía no han sido aclaradas por la Justicia.
Tras esta muerte, familiares y amigos de Sosa, acudieron a la comisaría de barrio Ciudad Evita, a unas pocas cuadras de donde se produjo esta muerte, y comenzaron a arrojar piedras a la sede policial, según informa El Doce.
En el ataque también habrían arrojado bombas molotov y hasta un oficial resultó herido de bala, con un disparo en la cabeza.
El efectivo herido está internado y su estado es estable, según contaron voceros policiales.
Por el ataque a la comisaría no hay detenidos, informó Policía.