Atenas hizo lo que tenía que hacer: ganar y por una gran diferencia. Es que el Griego venció este lunes por la noche a Quilmes de Mar del Plata por 89-71, en un duelo clave en el fondo de la tabla de la Liga Nacional de Básquet.
Ahora a Atenas le quedan dos partidos para saber cómo continuará su futuro en la Liga y seguir siendo así el conjunto con más años consecutivos en la máxima categoría.
Si bien las matemáticas aún hacen un guiño, era un cruce en el que la ventaja deportiva para el playoffs de permanencia estaba más que en juego. Por eso la necesidad de sacar una buena diferencia.
Con todo esto en mente el conjunto dirigido por Osvaldo Arduh salió desde el principio a "comerse" al rival. Tanto fue así que al primer cuarto lo cerró 29-16.
En el segundo, Atenas continuaba con un juego sólido en defensa y ataque. La diferencia siempre estuvo a favor de los cordobeses que cerraron el primer tiempo ganando 45-32.
El tercer cuarto se hizo muy largo en cuanto a la cantidad de interrupciones que sufrió el juego. Esto pareció beneficiar al Verde que sacó su mayor diferencia y cerró el cuarto 71-46.
El último cuarto fue una muestra de cómo viene sufriendo Atenas el cierre de los partidos. Arrancó con una diferencia de 25 puntos y Quilmes logró acercarse a 11. Pero siguió con el ritmo que imponía el local. Así logró terminar ganando un importante partido.
Para este compromiso no estuvieron a disposición Walter Herrmann, a quien se le realizaron estudios en el Instituto Cardiológico por una fibrilación auricular y deberá permanecer en reposo. Tampoco estará Maximiliano Stanic, quien evoluciona del desgarro en su pierna derecha pero que aún no está en condiciones de saltar al rectángulo.
Ahora deberán aguardar lo que suceda para ambos en las últimas dos fechas, en las que los cordobeses visitarán a Libertad y Estudiantes de Concordia y los marplatenses recibirán a La Unión de Formosa y chocarán con Peñarol en el clásico de la Ciudad.