La causa por los cuadernos de las coimas contínua. Esta vez fue el financista Ernesto Clarens el que brindó más detelles y complicó al empresario ligado con el kirchnerismo, Gerardo Ferreyra.
Según consiguió Clarín, el financista amplió por quinta vez su declaración indagatoria en su carácter de arrepentido y "dio nuevos nombres de representantes de empresas de la construcción que pagaban las coimas para los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner".
Clarens entregó un escrito esta semana ante el juez federal Claudio Bonadio y el fiscal Carlos Stornelli donde precisó "el significado de colores en una planilla en que registró pago de sobornos por obras de Vialidad Nacional y dio 18 nuevos nombres de representantes de empresarios", destallan en el mismo medio.
En la causa, que ya tiene 42 procesados, Clarens había admitido previamente "haber recibido instrucciones del ex secretario de Obras Públicas José López para recaudar 30 millones de pesos en sobornos para financiar el plan de viviendas sociales Sueños Compartidos de las Madres de Plaza de Mayo, otros 70 para la constructora Gotti y precisó que parte de la plata fue a campañas electorales como la del 2015, entre otros objetivos".
A su vez, Clarens afirmó que su trabajo "era cambiar el dinero a dólares o euros por lo que cobraba un porcentaje".
En su calidad de colaborador Clarens está procesado como miembro de una asociación ilícita encabeza por la ex presidenta Cristina Kirchner e integrada por el ex ministro de Planificación Julio De Vido y su mano derecha Roberto Baratta, pero con el beneficio de la excarcelación. Con esta ampliación se convirtió en un colaborador clave de la investigación.