Enclavado en la región de Punilla Tatu Carreta se erige como un santuario de biodiversidad y un escape perfecto para los amantes de la naturaleza. Este espacio se ha convertido en un destino predilecto para quienes buscan conectarse con el entorno natural y disfrutar de experiencias únicas.
Los visitantes de Tatu Carreta se sumergen en un mundo verde, donde la flora autóctona despliega su esplendor en cada rincón. Senderos bien trazados permiten explorar la diversidad de especies de plantas y árboles, mientras que aves endémicas deleitan con sus cantos a los visitantes ávidos de naturaleza.
Los más intrépidos pueden aventurarse en recorridos guiados que los llevan a través de bosques frondosos, revelando la riqueza de la fauna local. Desde monos aulladores hasta coloridas mariposas, la variedad de especies animales en Tatu Carreta fascina a grandes y pequeños.
Conservación y educación ambiental
Tatu Carreta no solo es un destino turístico, sino también un centro comprometido con la conservación y la educación ambiental. Programas educativos ofrecen a estudiantes y visitantes la oportunidad de aprender sobre la importancia de preservar este ecosistema único.
Además, el centro realiza esfuerzos significativos para la preservación de especies en peligro de extinción, colaborando con investigadores y biólogos para contribuir al conocimiento y la conservación de la biodiversidad regional.
Tatu Carreta se revela como un destino imperdible para quienes buscan una experiencia inmersiva en la naturaleza. Con su compromiso con la conservación, educación ambiental y comodidades sostenibles, este rincón natural ofrece mucho más que un simple escape; es una oportunidad para apreciar y preservar la belleza del mundo natural.
Cómo llegar
Tatu Carreta se encuentra a 40 kilómetros de Villa Carlos Paz, y el acceso es posible a través dela Ruta 38.