Con su guitarra y carisma enciende el la música folclórica, en cualquier escenario a lo largo y ancho de nuestro país. A sus 62 años, y luego de atravesar un severo cuadro de Coronavirus, anoche demostró que su magia sigue intacta. ¡Sí claro! estamos hablando del salteño más famoso, estamos hablando de " el Chaqueño Palavecino”, quien, como lo hace históricamente en cada edición del Festival Nacional de Folclore, fue el encargado de cerrar la noche con su fiesta única.
Y como sucede cada vez que el cantante pisa un escenario, dejó al público encendido con ganas de seguir bailando y cantando hasta el amanacer.
“El Chaqueño”es siempre garantía de convocatoria. La gente lo sigue, su público fiel le festeja todo, y le perdona todo también. Dueño de una dinámica única, anoche se ocupó de invitar al escenario a un pequeño fan y a una chica discapacitada acompañada de su mamá. Con esta última decidió romper el protocolo sanitario y retirar su barbijo para darle un beso. Algunos repudiaron el gesto. Durante su actuación, el cantante respaso todos sus éxitos y mantuvo al público de pie durante todo el show. Algo que hay que reconocer es esa megaenergía songular que se genera cuando suena “Amor Salvaje”, y que claramente anoche tiño de alegría la Plaza Próspero Molina,
Chaqueño al fin. Anoche fue la velada con mayor cantidad de público desde que comenzó el festival.
Tercera luna con folclore de pura cepa más invitados especiales
Otros grandes estuvieron sobre el escenario Atahualpa Yupanqui fueron los Los Carabajal, quienes tuvieron una gran noche, con una presentación intachable y la premiación que recibieron por parte de la Comisión municipal del Folclore. Se trata del Premio Camin a la trayectoria.
Otra cantante que fue premiada a galardón que se entrega en el festival a los artistas por su trayectoria fue Marité Berbel. La representante patagónica dejó en claro sus orígenes Mapuches- Huíncas Recitando un fragmento en idioma mapudungun (lengua mapuche).
También fueron parte de la velada “Los Nombradores del Alba” y “Los 4 de Córdoba”, quienes se ocuparon de realizar un sentido homenaje a Juan B Justo, uno de los primeros gobernadores de Córdoba poco recordado por la historia oficial.
Los “Por siempre Tucu”, fueron los que se animaron a romper el dogma folclórico e invitaron a compartir el escenario a un artista que resultó una sorpresa; se trata del Cóndor Sbarbati, el cantante de la Bersuit Bergarabat, de quién se desconocía su costado folclórico pero que recientemente publicó un disco de música tradicional. “Yo me vestía de gaucho si ellos se ponían el pijama”, dijo el cantante del palo rockero, a lo que el Coco Martos le respondió, muy atinadamente, que estos últimos años habían utilizado mucho el pijama, aludiendo claramente a la pandemia. Acto seguido se juntaron en una tremenda versión de “Luna Tucumana”. Guiño, guño para los que se animan a incluir nuevas voces, nuevos estilos, y en definitiva nuevos aires.
La noche se completó con Postales de Provincia, en este caso fue el turno de Salta y presentaron a varias cantoras. El cantor criollo Adrián Maggi brindó una excelente presentacón y ademñas se ocupó homenajear a los excombatientes de Malvinas.