Luego de la muerte de Pablo Marcelo Serrano, el hincha de River que murió este sábado al caer de la tribuna, se vivieron momentos de tensión fuera del Monumental. Familiares de la víctima agredieron a uno de los móviles de TN y tres fanáticos le arrebataron un arma a una policía y la quisieron matar.
El hecho ocurrió pasadas las 18 horas entre las calles Grecia y Jaramillo. Los tres hombres, quienes acababan de salir del estadio, encontraron en la vía pública a la agente María Castillo, se abalanzaron sobre ella y le sacaron su revolver reglamentario, el cual estaba cargado con 15 proyectiles.
Según informó TN, después de forcejear, la agente pudo ponerle el seguro al arma y los sujetos se dieron a la fuga por la calle 3 de Febrero en sentido a la avenida General Paz.
El personal del SAME fue hasta el lugar y atendió a Castillo, quien fue diagnosticada con una crisis nerviosa. Sin embargo, decidieron no trasladarla a ningún hospital.
Por medio de las cámaras de seguridad, las autoridades intentan dar con el paradero de los agresores. El hecho quedó caratulado como “robo y lesiones”.
Cómo fue la muerte del hincha de River
El partido entre River Plate y Defensa y Justicia por la fecha 19 de la Liga Profesional fue abruptamente suspendió a los 25 minutos del primer tiempo por el árbitro.
Desde las tribunas los hinchas gritaban y aplaudían intentando llamar la atención de los jugadores para frenar el enfrentamiento.
Un hincha que se ubicaba en la tribuna Sívori Alta del Estadio Más Monumental cayó 15 metros y murió inmediatamente. Se trata de Pablo Marcelo Serrano, de 53 años, quien había asistido a alentar a su equipo junto a su hija, pero en tribunas distintas.
La agresión al equipo de TN
“Me acerqué con el mayor de los respetos, les pedí ‘perdón’ por ir a hacerles una pregunta, me empujaron y me trataron mal”, relató la periodista de TN Cecilia Insigna.
Luego, cuando el móvil estaba en vivo, los integrantes de la filial Morón empezaron a pedir a los gritos que apagasen las cámaras y en ese instante comenzaron a golpear al equipo y arrojarles piedras.
Minutos más tarde, la Policía de la Ciudad llegó al lugar y pidió que terminase la transmisión.
