Los manteros desalojados hace casi un año de la Avenida Avellaneda, en el barrio de Flores, volvieron hoy al barrio de Flores para presionar al gobierno porteño e intentar instalarse en la emblemática avenida.
En el mes de abril, fueron desplazados por la policía, con graves incidentes. Pero los vendedores insisten en que el galpón que el Gobierno porteño les brindó en Once es insuficiente.
En esta oportunidad, desde la Asociación de Vendedores Libres aseguran que "el Gobierno de la Ciudad expulsó a más de 2000 manteros sin dar ninguna solución a los trabajadores a pesar de las declaraciones públicas de funcionarios sobre 'traslados o relocalizaciones" y que por ese motivo buscan reinstalarse en la calle.