El año pasado se registró la menor cantidad de muertos en siniestros viales en la ciudad de Buenos Aires de la última década, con 103 decesos, lo que significó una caída de 30% con respecto a 2018, informó la Secretaría de Transporte porteña.
De las muertes, casi la mitad fueron motociclistas (47%) seguidos por peatones (33%), ocupantes de automóvil (12%), ciclistas (7%) y ocupantes de transporte de pasajeros (1%), mientras que los varones representaron el 80% de los fallecimientos.
"Hoy podemos ver el resultado de años de trabajo, cumplimos nuestro compromiso y bajamos el 30% de las muertes en siniestros viales, lo que representa la cifra más baja en los últimos diez años", dijo el secretario de Transporte y Obras Públicas porteño, Juan José Mendez.
Y agregó: "La seguridad vial va a seguir siendo nuestra prioridad y vamos a continuar trabajando junto a las ONG's de familiares de víctimas y los vecinos y vecinas de la ciudad para que nadie más tenga que atravesar una pérdida que puede evitarse".
Con el primer Plan de Seguridad Vial de la Ciudad, que guió las políticas de movilidad segura en Buenos Aires durante el período 2016-2019, se logró un descenso del 30% respecto al 2018, del 29,5% respecto al promedio 2015-2018, y del 33% respecto al año 2015, que fue tomado como línea de base.
La tasa de mortalidad porteña es de 3,6 fallecidos cada 100.000 habitantes, lo que la ubica por debajo de las observadas a nivel nacional y la convierte en una de las principales ciudades latinoamericanas con índice más bajo.
Respecto al promedio 2015-2018, se observó una baja del 38% en los fallecimientos de peatones, del 38% en las de ocupantes de automóviles y del 18% entre los motociclistas.
Los siniestros de tránsito siguen siendo la principal causa de muerte en jóvenes, ya que el 60% de las víctimas fatales tenían entre 15 y 44 años, y la edad promedio de los fallecidos es de 37 años.