No importa por donde ingreses a Azul o por donde paseas, siempre te topas con un basurero a cielo abierto. En Azul tenemos por lo menos 15 basureros a cielo abierto que día a día expanden su superficie gracias a los residuos que arrojan los vecinos de la misma ciudad. Tirar basura en un terreno ajeno es como tirar basura adentro de nuestra misma casa. Azul es nuestra casa, que está ubicada en Argentina, en América latina, en el Planeta Tierra. La Tierra es la única casa que tenemos para vivir en el Universo. Si no la cuidamos, si la enfermamos ¿a dónde vamos a ir a vivir?
Pensar que alguien se va a encargar de hacer desaparecer la basura que dejamos en cualquier lugar es una ilusión, un pensamiento utópico. La basura no desaparece en el éter. Cada uno de nosotros tiene que hacer su parte y esto empieza en casa separando y reduciendo la mayor cantidad de residuos posibles. En realidad debe comenzar antes, con el consumo responsable. No comprar más de lo que realmente necesitamos, llevar nuestra propia bolsa de tela para hacer las compras y frascos a la dietética para rellenar, es solo el primer paso para reducir los residuos que generamos.
¿Azul ó Somalia?
Les propongo un ejercicio. Tomen el auto o la bicicleta y vayan hasta Av. 25 de Mayo Norte, recorran los costados de las vías del tren por Mujica, o vayan hasta Ruta 51 y Chaves. Deténganse un minuto a ver el paisaje. ¿Es este el Azul que queremos? ¿Qué estamos haciendo para que esto no suceda? En los basurales hay de todo, electrónicos y electrodomésticos rotos, sillones desvencijados, colchones viejos, toneladas de plásticos volando para los cuatro vientos y contaminando campos vecinos. ¿Es necesario vivir en la mugre? ¿Qué nos está pasando?
¿Queremos convertirnos en Somalia?
Una cadena sin fin
El problema de la basura comienza en casa, continua con la recolección escasa en varios barrios de la ciudad (las áreas peri urbanas tienen muy pocos contenedores) por parte de Transporte Malvinas y culmina en Eco Azul, el lugar a donde debieran darle la disposición final correspondiente a los residuos, pero no lo están haciendo. En Eco Azul se entierra la basura. Detrás del Club de golf están apareciendo lomas, está cambiando el paisaje. Quizás son una extensión de las sierras de Tandilia y no nos dimos cuenta…
Modelos vecinos
Laprida puso en marcha en 1991 la planta de residuos sólidos urbanos. Hace 30 años que aplica los 4 pasos: generación, recolección, tratamiento y disposición final. Y desde 2008 realizan relleno sanitario, en pozos de 70 x 30 mt. y 5 mt. de profundidad. Juan Errobidart, secretario de Obras Públicas de Laprida relata: “Cada persona genera un kilo de basura por día. La recolección es mitad orgánica y mitad inorgánica. La mitad orgánica va a un compostaje gigante en playas de 60 x 30 mt. Luego el abono generado es utilizado para diferentes espacios verdes, parque, plazas, balneario, etc. De la mitad inorgánica, el 25 por ciento va al relleno sanitario y el resto son inorgánicos, es decir reciclables o reutilizables (vidrios, latas, papel, cartón, plásticos, etc.) Estos van a la venta o ingresan en la economía circular”.
También cuenta Errobidart que trabaja en conjunto con otros municipios como Benito Juárez y Tapalqué, compartiendo información cuando uno de ellos encuentra una solución para la reutilización de residuos. Estos municipios aplican políticas públicas y las sostienen a través de los diferentes gobiernos. Piensan en la gente, gestionan, gobiernan a consciencia.
Laprida recoge la basura con dos camiones municipales para una población de 9000 habitantes (4500 por camión). Transporte Malvinas lo hace con 5 camiones para una población de 60.000 personas (12.000 por camión), seguramente acá también esta la razón del desborde de basura azuleño. ¿Alguien controla en la Municipalidad que se cumpla el contrato de Transporte Malvinas?
Laprida esta a 160 km. de distancia de Azul y quienes nos gobiernan están a años luz de querer implementar una política pública similar. No termino de darme cuenta si es por incapacidad de los gobernantes o porque sufren de apatía, les da lo mismo vivir entre la basura o en una ciudad limpia y sana.
Tandil se atrevió con una Ordenanza Municipal dictada por unanimidad de todos los partidos políticos, en la misma se impone:
ARTICULO 1º: DE LOS RESIDUOS. Establézcase que queda totalmente prohibido en todo el Partido de Tandil, arrojar, depositar, quemar y/o mantener residuos sólidos en la vía pública, como así también en espacios públicos o privados, fuera de los destinados por el Municipio para tal fin y para el servicio de recolección domiciliaria y de reciclado.
Quienes incumplan, deberán abonar una multa que cuyo mínimo será de un sueldo municipal, categoría 4 “administrativo”, 35 horas y hasta un máximo de 10 sueldos municipales de idénticas características. El infractor deberá abonar los gastos que demande la ejecución de los trabajos para volver el espacio afectado al estado anterior, pudiendo optar por realizarlo él mismo.
En caso de usar un vehículo, se podrá multar la patente y en caso de ser reincidente, se podría proceder al secuestro del mismo.
Algunas ideas
¿Podrá el Concejo Deliberante de Azul dictar una ordenanza como la tandilense? Nos beneficiaríamos todos. Los azuleños tendríamos una ciudad más limpia y sana, y al Ejecutivo le entraría dinero a sus arcas. Sería un caso “win-win”, a donde todos ganan.
Las multas no le resultan simpáticas a nadie, pero la verdad es que los argentinos nos educamos cuando nos tocan el bolsillo. Así nos corregimos vialmente con las multas por alta velocidad, estacionamiento indebido o pasar semáforos en rojo. Si esta fórmula funciona puede aplicarse a los basurales a cielo abierto colocando video cámaras que detecten a los tiradores seriales de basura. Se puede leer la patente del vehículo y así aplicar una multa. No parece difícil de implementar, solo se necesita voluntad política para aplicarlas.
La organización Punto Verde Azul es quien más está haciendo por la salud de nuestra ciudad. Promueve el cuidado del medio ambiente realizando jornadas de recolección de residuos periódicamente, y creó un listado de qué materiales reciclar en diferentes puntos de la ciudad, además brinda consejos muy útiles para hacerlo correctamente. Les recomiendo que la sigan en Instagram: @puntoverde_azul
Vale aclarar que el Concejo Deliberante local dictó en agosto 2020 la resolución 4449 en donde intima al Ejecutivo a hacer cumplir varias ordenanzas que incluyen las clausuras de los basurales a cielo abierto y una campaña de concientización de residuos, entre otros ítems relacionados con tratamiento de residuos. Ha pasado un año y no se ve voluntad política alguna. Si el Ejecutivo no cumple sus responsabilidades, entonces… ¿para qué está?
Creo que el resultado de las PASO es la respuesta. El país se tiñó de amarillo y el Ejecutivo azuleño se está destiñendo.
Guillermina Gómez Romero es periodista y autora del libro Azul, Guía de viaje. Su cuenta de Instagram es @guiadeazul_dao