Un prototipo del cohete Starship, de la empresa SpaceX, aterrizó este miércoles en Texas con éxito, pero poco después explotó. El aparato es la opción de la compañía del magnate Elon Musk para viajar a Marte.
“Un magnífico aterrizaje”, había comentado SpaceX en el video que transmitió en vivo el vuelo de prueba. Sin embargo al pie de la nave se veían llamas que fueron extinguidas por los equipos en el lugar y pocos minutos después el aparato explotó. De momento no se han dado explicaciones sobre el siniestro.
El prototipo, identificado como SN10, había decolado a las 23H20 GMT desde Boca Chica, Texas, para su tercer vuelo suborbital de prueba.
El aparato despegó impulsado por tres motores y luego viró para volar en posición horizontal. Llegó a alcanzar una altitud de 10 kilómetros antes de iniciar su descenso en forma vertical y logró posarse en el lugar indicado sin problemas visibles.
Otros dos prototipos, el SN8 y el SN9, se estrellaron al aterrizar en diciembre y luego a comienzos de febrero.
Los ensayos se realizan en un área casi desierta alquilada por SpaceX en el extremo sur de Texas, cerca de México y al borde del Golfo de México. La zona es suficientemente amplia como para no causar daños ni víctimas.
Musk imagina que algún día podrá lanzar varias naves a la conquista de Marte. Sin embargo, si se torna operativo, en principio el cohete serviría para vuelos más cortos, especialmente a la Luna.
Con información de AFP