El presidente Mauricio Macri inauguró el 135 período de sesiones ordinarias del Congreso, en lo que fue el segundo discurso del jefe de Estado ante el Parlamento. En su discurso, realizó un balance de su mandato, criticó a la oposición y prometió nuevas medidas para el 2017.
En su primer disparo contra el kirchnerismo, Macri sostuvo: "Juntos pudimos ir más allá de nuestras legítimas diferencias y aprobar leyes para comenzar a resolver muchos problemas". Luego, agregó: "era más fácil mirar en corto plazo pero estamos construyendo las estructuras de un país que nos contenga a todos".
Aunque no estaba previsto que se refiriera a la "herencia K" como el año pasado -en su primer inauguración de sesiones como Presidente- Macri lanzó una serie de duros cuestionamientos contra las administraciones K. "Después de una década de despilfarro y corrupción empezamos a normalizar el sector energético", fue uno de sus más fuertes cuestionamientos.
"No asumimos la presidencia para que nos hagan un monumento. No creemos en los liderazgos", agregó luego.
Educación
Uno de los momentos más tensos se sintió cuando el Presidente hablaba de la importancia de la Educación y el cuidado de los maestros cuando desde las bancas opositoras pidieron el llamado a la paritaria nacional docente.
En el momento que Mauricio Macri recordó el caso de maestras agredidas y amenazadas, un legislador le gritó: "también Baradel", en alusión al titular del gremio de los docentes bonaenreses que denunció amenazas cuando comenzaron las paritarias con el gobierno de María Eugenia Vidal.
Ante la insistencia del pedido y las interrupciones, Macri le respondió: "Cuidemos a los docentes, no creo que Baradel necesite que nadie lo cuide". En ese momento, el recinto se colmó de aplausos.
Pobreza y obras
"Mi principal preocupación es reducir la pobreza. Como ya lo he dicho muchas veces, espero que mi Gobierno se evalúe por el éxito que tengamos en este objetivo. Gobernar es una tarea humana. Implica acompañar a quienes necesitan una respuesta del Estado".
"Recibimos un país donde uno de cada tres argentinos está en la pobreza o en la indigencia. Es una cifra real. Es mucho más que un número. Son personas que mientras estamos acá en este recinto esperan soluciones concretas".
"Frente a los miedos que muchos querían imponer, mantuvimos y ampliamos derechos sociales, principalmente en jubilaciones y prestaciones. No podemos permitir que haya 12 millones de argentinos viviendo en villas y barrios precarios, sin agua y sin servicios básicos. Ya identificamos las zonas más críticas. Este año vamos a mejorar la situación de más de 480 familias, urbanizando 380 asentamientos informales".
"Recibimos un país donde sólo el 41% de los argentinos tenía cloacas. El 75% lo tendrá al final del mandato El 100% en zona urbana tendrá agua potable".
Con respecto a las obras, Macri apuntó: "A fin de este año vamos a tener 25 mil kilómetros de rutas", prometió y sostuvo que se trata de "algo histórico".
Inseguridad y Justicia
Macri destacó a los problemas de inseguridad como "las máximas angustias y preocupaciones". Destacó una nueva "estadística criminal" y el envío de las fuerzas federales "a los lugares de violencia". "En Rosario redujimos 20 por ciento tasa de homicidios y en más del 30 por ciento la de robos calificados. En la provincia de Buenos Aires asistimos a 31 municipios con fuerzas federales".
El Presidente aludió a la Justicia con un fuerte reclamo: "Queremos saber qué pasó con el fiscal Nisman y con su denuncia". "La Justicia necesita cambiar, creemos en la Justicia independiente" dijo Macri. Resaltó el programa que fomenta el ministro Germán Garavano de Justicia 2020, para tener un sistema judicial "cercano a la comunidad, moderno, ágil y transparente".
Antes de irse del recinto, Macri levantó y mostró con el brazo derecho un paquete de yerba. Se lo había entregado, en medio del discurso, la diputada María Britez (FPV-Misiones), que se acercó hasta el atril. Era una forma de visibilizar el conflicto de los yerbateros de Misiones.
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