El financista Ernesto Clarens declaró este martes ante la Justicia y brindó detalles de la ruta de sobornos de la que participó y que investiga el juez Claudio Bonadio y el fiscal Carlos Stornelli.
Según publica Clarín, "sólo desde 2005 a 2010, Clarens cobró de diferentes empresas contratistas del Estado más de 30 millones de dólares".
A su vez, indicó que la ex presidenta Cristina Kirchner "controlaba a qué empresas se les pagaba y a cuáles no, la prioridad era Austral Construcciones de Lázaro Báez", detallan en el mismo medio.
En tanto, el financista dueño de Invernes SA afirmó que "nunca la vio a la ex Presidenta y a Néstor Kirchner una sola vez en "El Palenque", un antiguo restaurante de Río Gallegos", cuando era el gobernador de Santa Cruz. Allí, "fueron presentados tras interrumpir un almuerzo y ese fue el único encuentro que admitió Clarens ante la Justicia".
Según la Justicia, "Clarens sólo se encargaba de cobrarle a las empresas que recibían contratos de Vialidad Nacional". En paralelo, brindó un listado de más de 80 empresas y aclaró que "las primeras cuarenta eran las que pagaban las coimas, las otras 40 no hacían pagos".
"Había un decreto instaurado, si no pagaban el 10% no trabajaban", explicó Clarens al momento de contar cómo funcionaba el sistema de sobornos que se institucionalizó desde el Estado, según detalla Clarín.